04-27-2017, 09:52 PM
25 de abril de 1898
El 25 de abril de 1898; Estados Unidos le declara oficialmente la guerra a España tras el hundimiento del USS Maine en la bahía de La Habana, Cuba; el 15 de febrero pasado y que había hecho que las tensiones se elevaran al máximo entre ambas potencias. Muchas décadas más tarde, historiadores pudieron acceder a documentos que corroboraron que el hecho realmente funcionó como un ataque de falsa bandera, es decir, un hundimiento con previa explosión realizado apropósito por los norteamericanos con la finalidad de justificar las acciones directas contra España para ocupar Cuba y otras islas pertenecientes a los restos del histórico imperio europeo.
Con la declaración de guerra de Estados Unidos, comienza un conflicto armado, donde Cuba, último bastión español en América, sería el escenario de una guerra fundamental para su historia. Cuba que había enfrentado a los españoles en dos guerras anteriores conocidas como la Guerra Grande y la Guerra Chica, se encontraba notablemente debilitada en su movimiento nacionalista tras la muerte de José Martí.
Los españoles habían logrado dominar la situación militar y política hacia 1895 aunque en el plano económico, la economía norteamericana había logrado penetrar indudablemente al conseguir enormes niveles de compra de la producción de azúcar de Cuba, superando inclusive a los propios españoles. La guerra respondió entonces a una fuerte motivación económica que tras la declaración de guerra norteamericana se trasladó a tres frentes: Cuba, Puerto Rico y Filipinas.
Entre todos los frentes, los estadounidenses movilizaron 300.000 hombres acompañados por 30.000 cubanos, mientras los españoles movilizaron 300.000 efectivos para intentar contener los avances estadounidenses. La guerra se prolongó por 3 meses y medio por lo que finalizó con el contundente triunfo de las fuerzas estadounidenses.
La guerra en Cuba fue la más cruel, los españoles sufrieron varios brotes de múltiples enfermedades lo que elevaron la cifra de muertos a 50.000 hombres. Tras este hecho, Cuba logrará su “independencia” aunque luego caerían dentro de la Enmienda Platt que les generaría una dependencia política y económica enorme; mientras Puerto Rico y Filipinas caerán en manos estadounidenses directamente constituyendo un novedoso imperio no europeo con posesiones en otros continentes fuera de América.
Por otro lado, España desaparecerá oficialmente como Imperio de ultramar, siendo el ocaso de uno de los mayores imperios en extensión territorial de la historia.
“Dulce et decorum est pro patria mori”