10-05-2017, 02:14 PM
5 de octubre de 1910
El 5 de octubre de 1910, en Lisboa, Portugal; se proclama la República de Portugal y se pone fin a la centenaria monarquía debido a la revolución que estallo en ese país contra los reyes y el antiguo orden aun presente en el país. El panorama de Portugal era muy particular debido a un desgaste político y económico que se venía viviendo desde fines del siglo XIX.
Muchos sectores políticos denunciaban que la monarquía se había subyugado y subordinado prácticamente a los intereses británicos al permitir explotar las riquezas de sus colonias a empresas británicas. Por otro lado, los gastos que la familia real tenia eran simplemente elevadísimos y esto contrarrestaba con un país que había quedado atrasado en tecnología y en cuestiones económicas siendo entonces un país bastante pobre de Europa, muy lejos de sus arcas antiguas.
Por otro lado sin dudas, la enorme inestabilidad política y social que atravesó Portugal marcada por un sistema de alternancia de los dos partidos en el poder (progresistas y regeneradores que hacían y deshacían lo que uno y otro habían hecho previamente), además de la dictadura de João Franco y la incapacidad política de los reyes que se desentendían de los problemas del país, generaron un desgaste enorme. El Partido Republicano, que se cargó al hombro una autentica campaña publicitaria en su favor y destrozó a la monarquía mostrándola como la ineptitud total logró captar a enormes sectores que pronto se colocaron en favor de aires de cambio para llevar a Portugal hacia un camino de progreso.
El 3 de octubre, unos 2.500 marineros y soldados se atrincheran apoyados por cientos de milicianos llegados desde Lisboa, Braga, Porto, etc; que defendían la Republica exigiendo el final de la monarquía. La monarquía responderá movilizando al ejército que sin embargo, no abriría fuego con sus compatriotas y se solidarizarán en el reclamo.
Con las fuerzas de coerción fuera de la influencia monárquica, cualquier causa y resistencia sería inútil. El rey Manuel II huye al extranjero mientras el profesor Teófilo Braga se convierte en el primer presidente provisional de la República Portuguesa, ejerciendo el cargo por breve período de tiempo, hasta el 4 de agosto de 1911, cuando se llame a elecciones.
Oficialmente a partir de este día, la monarquía portuguesa de más de 500 años desaparece para convertirse en otra República que fue proclamada a las 9 de la mañana del 5 de octubre en el ayuntamiento de Lisboa con un enorme clamor popular.
“Dulce et decorum est pro patria mori”