[Voluntario2]

Los problemas son varios.
El ministro García quedó escamado de los palos que les dieron a los C-130 acusados de ser chatarra. Seguramente le explicaron que no lo eran por parte de la FAU. No obstante, le queda al ministro - para mí - la "sensación térmica" de que les iban a dar más palos aún por aviones de combate "viejos".
Ahí primo su interés político, antes que el interés del Uruguay y de la FAU. También tiene su papel la oposición. Desconfía "a reglamento" de todo lo que propone el gobierno. En lugar de ayudar y decir "el control del espacio aéreo debe ser política de Estado y apoyamos en lo que necesite el gobierno", miran para el costado.
Hay además en la oposición una prevención mayor si los medios vienen de USA por aquello del "Imperialismo Yanqui". Si los aviones vienen de Europa o mejor aún de República Checa u otro otrora país socialista seguramente hubiera menos oposición.
También está el tema de que Argentina, a diferencia de Uruguay, siempre tuvo la pretensión de potencia. Pensemos por ejemplo la Argentina de fines de los setenta y la guerra de Malvinas, con aviones Mirage y Dagger.
García, finalmente, "mostró la hilacha" y una y otra vez mostraba a las FFAA como una gran ONG de apoyo a la población, una guardia nacional en mar y tierra. Con ese Ministro con suerte hubiéramos llegado a turbohélices. Para muestra los OPV más limitados y económicos que pudo comprar.