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Batallas y protagonistas de nuestro Ejercito.
#98
LA ACCIÓN DE PASO MORLÁN, 28 DE ENERO DE 1935.

Fue parte de la Revolución de los 9 días o Revolución Tricolor.
En este levantamiento, sus integrantes pertenecían a distintos partidos políticos. Por ello, usaron la Bandera de los 33.

El enfrentamiento en Morlán, fue el único que tuvo lugar en el oeste del país, hubo en otras partes del Uruguay.

Quienes participaron
Fueron un puñado de ciudadanos mal armados y con muy pocas nociones de disciplina a quienes galvanizaba y dotaba de valor, el rechazo al gobierno de facto del doctor Gabriel Terra. Uno de ellos fue el excepcional escritor Francisco "Paco" Espínola quien dejó su testimonio de los hechos en una carta al doctor Carlos Vaz Ferreyra, que retrata mejor que cualquier otra exposición aquel episodio sangriento, el peligro, la violencia y el miedo que todos experimentaron en el combate de Paso del Morlán.
 
 Paco participó de traje camisa y corbata y su rifle no funcionaba.
La llamada Revolución del Morlán, un intento de levantamiento armado contra el gobierno del doctor Gabriel Terra, quien luego de ser electo democráticamente había disuelto el Parlamento en marzo de 1933 y ejercía el poder total, abortó prácticamente en sus primeras horas.

La revolución había empezado el 26 de enero en las cercanías de Mercedes. Su líder era Antonio Paseyro (del Movimiento Blanco Radical) quien habla de un contingente de “28 hombres (todos civiles), 25 fusiles y 5 vehículos”, autos y pequeños camiones.
Un grupo proveniente de Dolores y Cañada Nieto, días antes habían ocupado la Comisaría de Cañada Nieto, donde se adueñaron de algunas armas y municiones. 

Relato del líder Antonio Paseyro
En Paso Méndez recibimos chasque informándosenos de la nueva, que el comandante Alonso estaba en Paso Morlán.
Cuando llegamos, por indicación suya, fruto de su perspicacia y de sus condiciones de guerrillero experto, no ocupamos el Paso mismo, sino que acampamos  a 400 metros. Puede asegurarse que  a esta acertada disposición se debió el auspicioso resultado. El primer choque contuvo en su primer empuje a los gubernistas. Fue una fuerza de seis hombres al mando del Oficial Quintana, de la gente de Alonso.

 Luego se les unió otro grupo de similar tamaño, encabezado por Leopoldo Pignataro, de Rosario y su zona; y desde San José, llegaron más rebeldes, entre los cuales estaba el escritor Paco Espínola (de familia de raigambre blanca). En total, 72 hombres, mal armados y sin formación militar. 

En las alturas de ese estratégico enclave sobre el arroyo Colla, se apostó un grupo de 72 revolucionarios, compuesto por blancos, colorados, anarquistas, socialistas y comunistas, que se enfrentó a una fuerza mixta de 56 efectivos provenientes del Batallón de Infantería N° 11 y de la 1° Sección Policial de Colonia. En un combate de resultado incierto, en el que ambos bandos se adjudicaron la victoria, tres revolucionarios resultaron muertos y dos gubernistas cayeron en acción.

[Imagen: Iv5br-R-8CSttjETAoGZlKCvXUJxyrfhCHsck7f4...Ah89nqmVM1]
Tropas gubernamentales
 
Contó Paco Espínola
"El día 28 de enero "peleamos en el Paso del Morlán. Recién caíamos al paso cuando los jefes gritaron: "a las armas". Corrí para ir a formar la primera y única línea de combate. Recién me habían dado un remington desesperadamente viejo. A mi izquierda entró un joven profesor del liceo de Mercedes, finocultísimo, valiente. Se inició el fuego. Nos llovían las balas. Mi primera bala no salió. Volví a cargar y tirar. Idéntico resultado. Y me envolvían los endemoniados silbidos. Cargué de nuevo, rabioso. Y se atracó la bala de tal manera que no hubo forma de hacerla mover. No tenía baqueta. El jefe se me acercó y me ordenó que me quedara inmóvil en el suelo, para no hacer tanto blanco. Era imposible retroceder porque detrás nuestros hervía un infierno de balas. Y allí me quedé exactamente una hora y cinco minutos. Hubo un momento en que el fuego nos llegó por la izquierda y la derecha también. Creí que nos rodeaban. Pero nuestro fuego los obligó a restablecer su línea.

Al llegar la noche, terminó la pelea. Tratábamos de enviar los heridos en los autos hacia los pueblos cercanos. Los muertos quedaron en el campo. Y de pronto un espantoso y potente ¡Cuaaaaac! como una carcajada inconcebiblemente burlona, resonó en la noche. Aún los acostumbrados a la vida del campo nos estremecimos. Era tan fuerte que no parecía un zorro. "¡Se burlan de nosotros!" rugió uno. 
El enemigo que se había retirado, ¿había vuelto y nos tendría rodeados? No, era un zorro. En mi vida olvidaré aquel grito. Un rato después, a pie, con nuestro jefe herido en un brazo, nos pusimos en marcha. Sin comer, entre espinas de la cruz y cardales que nos martirizaban, hicimos esa noche, dando vueltas para despistar, siete leguas a pie. (...)

Se sintieron unos tiros. Yo había podido conseguir hacía un momento, un tarro de conservas de durazno que encargué a uno que tenía que pasar por una pulpería. Cuando oí los tiros, hundí mi cuchillo en la lata, me eché al suelo detrás de un árbol e indiferente a todo me comí casi todo el contenido. Era viernes de mañana y no comía desde el mediodía del martes. Sin esos duraznos me habría muerto de debilidad.

Este intenso tiroteo, dejó como saldo tres revolucionarios muertos (Raúl Magariños Solsona, Alberto Saavedra y Pedro Sosa), y varios heridos que se recuperaron. En el otro bando, cayeron “un militar y un policía”, según Paseyro, o “3 de mis hombres”, según el Mayor Ríos (uno de los militares puede haber fallecido días después, como sucedió con Sosa).

El resultado de la batalla fue incierto, pero lo concreto es que la columna rebelde no pudo continuar hacia San José, y la mayoría de los hombres se rindió enseguida o fue apresado unos días después de “vagar por los montes, sin agua ni comida”, como diría Espínola.

Se llevaron los heridos al hospital de Rosario y el resto de los prisioneros fue conducido primero a la comisaría local y después al cuartel de Colonia. 48 horas después eran puestos en libertad por orden del Ministro de Defensa Nacional. No se querían más muertos ni mártires.

[Imagen: class.php?i=7392de%20todo23%20109.jpg]

Fotos que muestran el lugar, monolito y placa conmemorativa. 

Texto de Lilián Valikosqui
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
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Mensajes en este tema
RE: Batallas y protagonistas de nuestro Ejercito. - Artiguista - 01-30-2021, 02:09 AM

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