10-28-2016, 11:50 PM
No concibo que en un espectáculo de masas, sea un partido de fútbol, una carrera de caballos o un concierto en el Centenario o el Parque Rodó, no haya Policía.
La presencia de la Policía es disuasoria y preventiva. Y cumple tareas que los guardias privados no pueden cumplir. ¿Puede cachearme un guardia privado? Creo que no. ¿ Qué puede hacer un guardia privado ante un sujeto que saque a relucir un cuchillo y ni qué hablar un revólver? Nada.
Se dice por algunos que la presencia-la sola presencia- policial incita a las masas a portarse mal. No creo que sea tan así, pero de serlo, eso da la pauta de lo enferma que está la sociedad uruguaya.
Diga lo que diga el senador Agazzi en todas partes del mundo la Policía da garrotazos a los revoltosos. En todo el mundo. Claro, debe hacerlo bien, pegándole a quien corresponde y no dando palo a un sujeto que va de la mano con su hijo o su señora. Tampoco debe lanzar gases lacrimógenos al voleo, porque puede acarrear graves consecuencias, como tumultos o gente semi asfixiada.
Pero que la Policía tiene que estar presente, está fuera de toda duda, al menos para mí.
La presencia de la Policía es disuasoria y preventiva. Y cumple tareas que los guardias privados no pueden cumplir. ¿Puede cachearme un guardia privado? Creo que no. ¿ Qué puede hacer un guardia privado ante un sujeto que saque a relucir un cuchillo y ni qué hablar un revólver? Nada.
Se dice por algunos que la presencia-la sola presencia- policial incita a las masas a portarse mal. No creo que sea tan así, pero de serlo, eso da la pauta de lo enferma que está la sociedad uruguaya.
Diga lo que diga el senador Agazzi en todas partes del mundo la Policía da garrotazos a los revoltosos. En todo el mundo. Claro, debe hacerlo bien, pegándole a quien corresponde y no dando palo a un sujeto que va de la mano con su hijo o su señora. Tampoco debe lanzar gases lacrimógenos al voleo, porque puede acarrear graves consecuencias, como tumultos o gente semi asfixiada.
Pero que la Policía tiene que estar presente, está fuera de toda duda, al menos para mí.