12-28-2017, 08:52 AM
Turistas de alto vuelo en el Este
Más de 100.000 pasajeros pasarán por el aeropuerto de Laguna del Sauce este verano.
En aviación general, se aguardan 1.850 aterrizajes en la temporada. Foto: R. Figueredo
ANDRÉS LÓPEZ REILLY
Jueves, 28 Diciembre 2017
![[Imagen: 5a44378e45a7b.jpeg]](https://sc2.elpais.com.uy/files/article_main/uploads/2017/12/27/5a44378e45a7b.jpeg)
En aviación general, se aguardan 1.850 aterrizajes en la temporada. Foto: R. Figueredo
La operativa en el Aeropuerto de Punta del Este empezó fuerte el fin de semana pasado, con un promedio de entre ocho y 10 vuelos diarios que llegan básicamente de Argentina y Brasil. También lo están haciendo desde Santiago de Chile, que es la novedad de este año en la terminal aérea de Laguna del Sauce.
Más de 100.000 pasajeros pasarán por el aeropuerto en alta temporada, entre arribos y partidas, marcando por tercer año consecutivo un aumento de 15% de argentinos, un fenómeno que los operadores adjudican al "efecto Macri"
"La historia dice que el mayor momento de actividad privada son los últimos días del año y los primeros del año siguiente. Esta semana es clave", comenta a El País Juan Lescarboura, gerente general del aeropuerto de Punta del Este.
Entre el 15 de diciembre y el 15 de febrero, el aeropuerto esteño recibe la mitad de los pasajeros que lo utilizan durante el año. Tiene un flujo de unos 200.000 usuarios, 50% de los cuales llegan en un lapso de tres meses.
En aviación general, que es la que mayor cantidad de vuelos genera, hay unos 3.700 aterrizajes anuales, 50% de los cuales ocurren en temporada. Algunos de los pequeños aviones que se posan en su pista, como el Cessna Citation bimotor, llegan a costar medio millón de dólares. A su vez, recibe unos 900 vuelos comerciales, la mitad de los cuales se concentran en verano.
El año pasado, dos compañías operaron de forma permanente en la terminal: Aerolíneas Argentinas y Latam. En verano, ambas incrementan la cantidad de vuelos y las ciudades de conexión. A ellas se suman Amaszonas, Azul, Sky (una novedad de este verano) y Andes, una empresa argentina de cabotaje que empezó a llegar el viernes de la semana pasada con un avión de 165 plazas.
Aviones privados.
Punta del Este recibe más vuelos privados que Carrasco. Pero del total de turistas, estas pequeñas aeronaves aportan solamente un 10%, lo cual se debe a que en promedio trasladan 2,5 pasajeros, cuando una comercial transporta unos 160.
El personal del aeropuerto se duplica en temporada. El aeropuerto tiene unas 60 personas que trabajan de forma permanente y para este verano ingresaron otras 60, reforzando áreas claves como la atención al cliente, choferes para atender la actividad privada, personal de rampa, sala VIP y FBO.
Un operador de base fija FBO (por las siglas en inglés de Fixed Base Operator) identifica a quien presta una variedad de servicios personalizados, una especie de gestoría que incluye una sala especial para recibir al viajero, catering y revistas para el avión, alquiler de automóviles y reserva de hoteles en Punta del Este. Son servicios que marcan la diferencia y que no son para cualquier mortal.
Desde Chile.
Hace 7 u 8 años, cuando Corporación América compró el aeropuerto, había algunos vuelos que llegaban desde Santiago, pero después —salvo algún chárter— dejaron de hacerlo.
Este año empezaron a llegar Latam y Sky, ambas con dos vuelos semanales, lo cual suma un tipo de público "que en Punta del Este no abunda".
"Nosotros estamos en permanente contacto con las aerolíneas, tanto por Carrasco como por el resto de los aeropuertos que tiene Corporación América en el mundo. Principalmente, la aerolínea debe detectar que haya un mercado para llegar", dice Lescarboura.
La particularidad que tiene el aeropuerto esteño es que es básicamente receptivo. De los 200.000 pasajeros que llegan por año, solo el 3% son uruguayos. Son turistas que van y que vienen. Por eso se dice que la terminal tiene un solo mercado, no es bidireccional. Carrasco, por ejemplo, recibe más de 50% de uruguayos.
"Sin duda las aerolíneas tienen que haber detectado una demanda de Santiago. Y en ese contexto es que, meses antes, se ponen en contacto tanto con las autoridades nacionales así como con nosotros, para hablar sobre servicios, costos y todo lo que hace a una compañía", explica Lescarboura.
Para una aerolínea, el costo aeroportuario no es tan relevante a los efectos de la toma de decisiones. Lo principal para abrir una ruta es que exista un mercado. "Ahí nosotros colaboramos con beneficios, ventajas comparativas y descuentos. Esto se hace con todas las compañías, dependiendo de la cantidad de operaciones que hagan", explica el gerente general del aeropuerto de Punta del Este.
Haciendo pista.
En estos días el aeropuerto de Punta del Este tiene un promedio de entre ocho y 10 vuelos diarios que llegan básicamente de Argentina y Brasil. También se sumó este año Santiago de Chile. En Laguna del Sauce hay 3.700 aterrizajes anuales, 50% de los cuales son en temporada. Algunos de los pequeños aviones que se posan en su pista, como el Cessna Citation bimotor, llegan a costar medio millón de dólares. Juan Lescarboura, gerente general del aeropuerto, anticipa un aumento de 15% de argentinos este verano.
EFECTO MACRI
"Esperamos 15% más de argentinos este año".
Casi el 70% de los pasajeros que viajan por el Aeropuerto de Punta del Este son argentinos. "Estamos muy expectantes con la apertura del mercado en Argentina, con esta desregulación que hizo el gobierno de Mauricio Macri. Este aeropuerto básicamente recibe a la región, no está pensado para vuelos de larga distancia, para uno comercial que venga de Europa, por ejemplo, porque no tiene ese doble flujo", explica Juan Lescarboura.
"Después está la expectativa por la propia demanda. Desde el cambio de gobierno en Argentina el crecimiento ha sido de un 15% anual. Y se estima que este año será similar. No solamente por el cambio de gobierno, sino también por diferentes medidas como el tema del cepo cambiario que se levantó. Además, sin dudas la diferencia cambiaria y los beneficios fiscales que otorga el gobierno uruguayo para los turistas hacen que hoy Punta del Este no resulte caro para los argentinos", sostiene el gerente general del aeropuerto.
Más de 100.000 pasajeros pasarán por el aeropuerto de Laguna del Sauce este verano.
En aviación general, se aguardan 1.850 aterrizajes en la temporada. Foto: R. Figueredo
ANDRÉS LÓPEZ REILLY
Jueves, 28 Diciembre 2017
En aviación general, se aguardan 1.850 aterrizajes en la temporada. Foto: R. Figueredo
La operativa en el Aeropuerto de Punta del Este empezó fuerte el fin de semana pasado, con un promedio de entre ocho y 10 vuelos diarios que llegan básicamente de Argentina y Brasil. También lo están haciendo desde Santiago de Chile, que es la novedad de este año en la terminal aérea de Laguna del Sauce.
Más de 100.000 pasajeros pasarán por el aeropuerto en alta temporada, entre arribos y partidas, marcando por tercer año consecutivo un aumento de 15% de argentinos, un fenómeno que los operadores adjudican al "efecto Macri"
"La historia dice que el mayor momento de actividad privada son los últimos días del año y los primeros del año siguiente. Esta semana es clave", comenta a El País Juan Lescarboura, gerente general del aeropuerto de Punta del Este.
Entre el 15 de diciembre y el 15 de febrero, el aeropuerto esteño recibe la mitad de los pasajeros que lo utilizan durante el año. Tiene un flujo de unos 200.000 usuarios, 50% de los cuales llegan en un lapso de tres meses.
En aviación general, que es la que mayor cantidad de vuelos genera, hay unos 3.700 aterrizajes anuales, 50% de los cuales ocurren en temporada. Algunos de los pequeños aviones que se posan en su pista, como el Cessna Citation bimotor, llegan a costar medio millón de dólares. A su vez, recibe unos 900 vuelos comerciales, la mitad de los cuales se concentran en verano.
El año pasado, dos compañías operaron de forma permanente en la terminal: Aerolíneas Argentinas y Latam. En verano, ambas incrementan la cantidad de vuelos y las ciudades de conexión. A ellas se suman Amaszonas, Azul, Sky (una novedad de este verano) y Andes, una empresa argentina de cabotaje que empezó a llegar el viernes de la semana pasada con un avión de 165 plazas.
Aviones privados.
Punta del Este recibe más vuelos privados que Carrasco. Pero del total de turistas, estas pequeñas aeronaves aportan solamente un 10%, lo cual se debe a que en promedio trasladan 2,5 pasajeros, cuando una comercial transporta unos 160.
El personal del aeropuerto se duplica en temporada. El aeropuerto tiene unas 60 personas que trabajan de forma permanente y para este verano ingresaron otras 60, reforzando áreas claves como la atención al cliente, choferes para atender la actividad privada, personal de rampa, sala VIP y FBO.
Un operador de base fija FBO (por las siglas en inglés de Fixed Base Operator) identifica a quien presta una variedad de servicios personalizados, una especie de gestoría que incluye una sala especial para recibir al viajero, catering y revistas para el avión, alquiler de automóviles y reserva de hoteles en Punta del Este. Son servicios que marcan la diferencia y que no son para cualquier mortal.
Desde Chile.
Hace 7 u 8 años, cuando Corporación América compró el aeropuerto, había algunos vuelos que llegaban desde Santiago, pero después —salvo algún chárter— dejaron de hacerlo.
Este año empezaron a llegar Latam y Sky, ambas con dos vuelos semanales, lo cual suma un tipo de público "que en Punta del Este no abunda".
"Nosotros estamos en permanente contacto con las aerolíneas, tanto por Carrasco como por el resto de los aeropuertos que tiene Corporación América en el mundo. Principalmente, la aerolínea debe detectar que haya un mercado para llegar", dice Lescarboura.
La particularidad que tiene el aeropuerto esteño es que es básicamente receptivo. De los 200.000 pasajeros que llegan por año, solo el 3% son uruguayos. Son turistas que van y que vienen. Por eso se dice que la terminal tiene un solo mercado, no es bidireccional. Carrasco, por ejemplo, recibe más de 50% de uruguayos.
"Sin duda las aerolíneas tienen que haber detectado una demanda de Santiago. Y en ese contexto es que, meses antes, se ponen en contacto tanto con las autoridades nacionales así como con nosotros, para hablar sobre servicios, costos y todo lo que hace a una compañía", explica Lescarboura.
Para una aerolínea, el costo aeroportuario no es tan relevante a los efectos de la toma de decisiones. Lo principal para abrir una ruta es que exista un mercado. "Ahí nosotros colaboramos con beneficios, ventajas comparativas y descuentos. Esto se hace con todas las compañías, dependiendo de la cantidad de operaciones que hagan", explica el gerente general del aeropuerto de Punta del Este.
Haciendo pista.
En estos días el aeropuerto de Punta del Este tiene un promedio de entre ocho y 10 vuelos diarios que llegan básicamente de Argentina y Brasil. También se sumó este año Santiago de Chile. En Laguna del Sauce hay 3.700 aterrizajes anuales, 50% de los cuales son en temporada. Algunos de los pequeños aviones que se posan en su pista, como el Cessna Citation bimotor, llegan a costar medio millón de dólares. Juan Lescarboura, gerente general del aeropuerto, anticipa un aumento de 15% de argentinos este verano.
EFECTO MACRI
"Esperamos 15% más de argentinos este año".
Casi el 70% de los pasajeros que viajan por el Aeropuerto de Punta del Este son argentinos. "Estamos muy expectantes con la apertura del mercado en Argentina, con esta desregulación que hizo el gobierno de Mauricio Macri. Este aeropuerto básicamente recibe a la región, no está pensado para vuelos de larga distancia, para uno comercial que venga de Europa, por ejemplo, porque no tiene ese doble flujo", explica Juan Lescarboura.
"Después está la expectativa por la propia demanda. Desde el cambio de gobierno en Argentina el crecimiento ha sido de un 15% anual. Y se estima que este año será similar. No solamente por el cambio de gobierno, sino también por diferentes medidas como el tema del cepo cambiario que se levantó. Además, sin dudas la diferencia cambiaria y los beneficios fiscales que otorga el gobierno uruguayo para los turistas hacen que hoy Punta del Este no resulte caro para los argentinos", sostiene el gerente general del aeropuerto.