• ¡Bienvenidos a los Foros de Uruguay Militaria!
  • Por favor registrese para comentar y participar.
  • .
¡Hola, Invitado! Iniciar sesión Regístrate


Calificación:
  • 1 voto(s) - 5 Media
  • 1
  • 2
  • 3
  • 4
  • 5
Fortificaciones en nuestro territorio
#1
El sistema de Fortificaciones en la Banda Oriental: Montevideo, Santa Teresa, San Miguel y Santa Tecla: 1762-1777


*Juan C. Luzuriaga

Estrategia y geopolítica en la América del siglo XVIII
Las fuerzas militares en América tenían como objetivo principal la soberanía del territorio. Sus posiciones fortificadas eran en la segunda mitad del siglo XVIII parte relevante en esta estrategia que tenía características propias: una plaza que en este continente (Europa) se tendría con justo motivo por débil, estando expuesta a ser sitiada por numerosos ejércitos bien provistos, es muy defendible en América, donde los costos de las expediciones, la intemperie del clima, la facilidad con que los víveres se corrompen, los pocos recursos que proporciona el país para la subsistencia y las demás circunstancias locales dificultan mucho el buen éxito de una invasión.

La Banda Oriental tenía una posición geopolítica clave en el siglo XVIII, entre las posesiones portuguesas y españolas. Se presentaba como la extensión lógica del virreinato del Brasil por el sur, que se estaba asegurando la posesión de Río Grande. Los beneficios de su ocupación eran varios. En el ámbito regional ello habilitaba a los lusitanos el ingreso a las cuencas de los ríos Uruguay y Paraná, además de servirles de enlace con la Colonia del Sacramento.

La estrategia defensiva de la corona española en el Río de la Plata se aplicó desde 1763, con la mejora del fuerte de San Miguel, la construcción en piedra de las fortificaciones de Santa Teresa y la erección de Santa Tecla, además de reforzar a Montevideo con murallas y bastiones. Se complementaba con el establecimiento de regimientos veteranos fijos apoyados por milicias además de la presencia de la Real Armada con naves e instalaciones.

Las rutas estratégicas: La Angostura y la Cuchilla Grande
Desde el sur del Brasil hacia la Banda Oriental había tres puntos de pasaje obligado. Uno de ellos, al sur, atravesaba un sistema de pantanos y barras de arena costera. Era el camino conocido al principio como Castillos Grandes y más tarde como La Angostura, sobre el océano Atlántico. El informe de un contemporáneo, Joaquín del Pino, revela la importancia del lugar: llaman a este sitio la Angostura, tal vez por ser un paso estrecho, preciso para venir del Río Grande a Maldonado y Montevideo, y para ir de estos allá; por cuya circunstancia se contempló muy útil su conservación.

Del Pino abundaba en la explicación: siempre se vea el Enemigo obligado a venir por este paso preciso desde el Río Grande pues el dar la vuelta por las sierras, bien sea para tomar por la espalda este paraje, para ir a Maldonado o a Montevideo se tiene […] por moralmente imposible su ejecución; no solo por la considerable distancia, sino es que para el paso de carruajes, artillería y demás efectos precisos, dan por imposible su logro.
Es evidente la importancia estratégica del lugar. Quien lo dominase poseía el mejor camino a Río Grande y a la Banda Oriental. Otro de los pasajes obligados, al norte, era por la sierra del Tape, una continuación de la cuchilla Grande. Constituía el camino a los siete pueblos de las Misiones orientales. Estaba defendido por el puesto de San Martín y, en su momento, por los pueblos misioneros. Estaba en las cercanías de las fortificaciones de Río Pardo. Se conformaba por unas modestas construcciones y unas pocas piezas de artillería. El último punto se hallaba por el centro de la cuchilla Grande, a la altura de la naciente del río Negro. En esa posición estaba emplazado el fuerte de Santa Tecla.


Tácticas y estrategias del siglo XVIII
Durante el siglo XVIII la estrategia de la mayoría de los generales se basaba en el desplazamiento de sus ejércitos a efectos de conformar una superioridad táctica que obligase al enemigo a retirarse, o a rendirse si estaba ubicado en una plaza fortificada. Se procuraba evitar las batallas, que debían librarse a corta distancia, debido al poco alcance de los mosquetes de la época, y resultaban entonces con grandes bajas para ambos bandos.

El costo de mantenimiento de los ejércitos era muy alto, y se hacía muy difícil reponer las pérdidas tanto humanas como materiales. En cambio, un ejército operativo siempre era una amenaza. Normalmente se lo mantenía en acuartelamientos o en plazas fortificadas para emplearlo en el momento oportuno. En estas circunstancias buen número de los combates y batallas se producían entre fuerzas que mantenían el sitio a una plaza fuerte y los ejércitos que trataban de liberar a los asediados.

La guerra de asedio
Las fortificaciones que se erigían en el siglo XVIII seguían en líneas generales el llamado sistema Vaubán. El nombre alude a un prestigioso ingeniero militar francés, Sebastián Le Presté, señor de Vaubán (1633-1707). Vaubán había estudiado cómo construir obras defensivas eficaces ante las armas de fuego. Mientras el castillo medieval tenía altos muros y torres para dificultar el asalto de la infantería enemiga, Vaubán concibió fortificaciones de relativamente poca altura y muy resistentes al fuego de artillería.

[Imagen: 220px-Vauban_picture.jpg]
Sebastián Le Presté, señor de Vaubán

Los vértices de estos fuertes estaban defendidos por baluartes en los que se colocaba artillería. Los baluartes se protegían entre sí, al tiempo que podían cruzar sus fuegos. Estaban unidos por un muro de piedra denominado cortina. Algunas ciudades contaban también con un núcleo dentro de las fortificaciones: la ciudadela. Se ubicaba como un bastión de última resistencia. Desde mediados del siglo XVII generales y artilleros comenzaron a estudiar con detenimiento el ataque a las fortificaciones.

[Imagen: image1.jpg]

Vaubán había ganado también fama por su desarrollo de las técnicas de asedio. En principio, la primera medida que se tomaba era intimar la rendición y al mismo tiempo establecer trincheras en las cercanías de la ciudad asediada. Luego se establecerían nuevas posiciones protegidas, cada vez más cerca del objetivo. Uno de los elementos que se tomaban en cuenta era el agotamiento de víveres y pertrechos de los defensores, esperando su rendición. Así, en el siglo XVIII el ataque a una fortificación se había convertido en muchos sentidos una cuestión matemática. Siempre se podía estimar en días las posibilidades de defensa de una guarnición.

Los cuarteles y otros fuertes cercanos eran elementos clave para la construcción y la defensa de una posición. En la estrategia de asedio lo ideal era rendir la plaza fuerte enemiga con las menores bajas propias posibles. De esa forma, la última decisión era el asalto. En ese caso se debía combinar la psicología con la acción. Para doblegar la voluntad del comandante de la fortaleza enemiga se le debía asegurar que su proceder era en un todo honorable, que no resultaba indigno entregar su fortificación teniendo en cuenta las fuerzas con que contaba y la resistencia que había opuesto.
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
#2
Fortificaciones en América meridional

Fuerte de San Miguel

Los orígenes del fuerte de San Miguel, el más antiguo de la región del Plata, se remontan a 1734. En ese año Esteban del Castillo, alférez de los Reales Ejércitos, construyó con tepes —o sea, con tierra apisonada— una posición fortificada en las cercanías del arroyo San Miguel, en la Angostura. Luego de esta prefundación sería el momento de los portugueses.
En 1737 el brigadier José Da Silva Páez fue enviado por el gobernador de Río de Janeiro, Gomes Freire de Andrade, a auxiliar a Colonia del Sacramento. A fines de ese año se le ordenó que levantara fortificaciones en la región este. En lo que hoy es la barra de Río Grande, Da Silva Páez construyó un fuerte al que llamó Jesús María y José, y unos kilómetros hacia el interior, otra fortificación a la que denominó Santa Ana. Finalmente edificó un tercero en las proximidades del arroyo San Miguel, cuyo nombre tomó.

Igual que el español, se construyó con tepes; abarcaba una superficie de tres mil metros cuadrados y tenía seis cañones. Posteriormente fue reedificado, en su ubicación actual, con piedra seca. Hacia 1740 ya tenía su configuración definitiva según el sistema Vaubán. Con un perímetro de 300 metros y a 35 metros de altura sobre el nivel del mar, estaba destinado a proteger y vigilar el paso conocido como la Angostura. Para 1762 tenía quince cañones y dos morteros; su guarnición contaba con cerca de un centenar de hombres.

[Imagen: 75543_245517712453387_118909927140912896...e209272ce2]
Interior del Fuerte de San Miguel

Fortaleza de Santa Teresa

[Imagen: 12524255_245518215786670_920714847463171...e=578A05D5]
Acceso principal de la Fortaleza de Santa Teresa

En 1762 el gobernador de Río de Janeiro, conde de Bobadela, destacó al coronel Tomás Luis Osorio para construir una nueva posición fortificada en la zona de la Angostura. Responsable de la construcción fue el ingeniero Juan Gomes de Mello. Ya iniciada la obra, en 1763 fue capturada por las fuerzas españolas. Santa Teresa era un pentágono irregular cuyo lado exterior más grande medía 151 varas. Los cinco baluartes, siguiendo la línea izquierda desde la puerta principal, eran San Juan, San Carlos, San Luis, San Clemente y San Martín. Contaba también con comandancia, capilla, cocinas, fraguas, cuadras para la tropa y enfermería.

[Imagen: 12094812_245517989120026_571285382365282802_o.jpg]Vista aérea de la Fortaleza de Santa Teresa

Fortaleza de Santa Tecla

[Imagen: 12832479_245519342453224_349778122197339...88fc948f5b]
Plano de la Fortaleza de Santa Tecla

Otra fortificación construida en este caso por los españoles fue Santa Tecla. Se ubica por la cuchilla Grande, en lo que hace al centro y sur de la Banda Oriental. Es un cruce de cuchillas: elevación cercana a las nacientes del río Negro y el Pirai Mini.

Esta ubicación fue elegida por ser fácilmente defendible al ser uno de los lados escarpado. Estaba ubicado a cien leguas de Montevideo, cerca de Bagé, a unos 500 kilómetros.
Fue un lugar señalado como importante y estratégico por quien fuera encargado del desalojo de las Misiones, Gaspar de Munive y Tello, marqués de Valdelirios en 1755. En primeros días de 1774 el gobernador de Buenos Aires, Juan José de Vértiz, decidió enfrentar los movimientos de los portugueses y saliendo en campaña ordenó construir Santa Tecla, comisionando al ingeniero Bernardo Lecocq.

Era un fuerte tipo Vaubán con foso, rastrillo y cinco baluartes. Por el portón de entrada y de izquierda a derecha del fuerte: San Miguel, San Agustín, San Francisco, San José y San Juan Bautista. Su aspecto recuerda en algunos sentidos a Santa Teresa. Contaba con Capilla, pabellón de oficiales, cuartel para la tropa, hospital y almacenes.

[Imagen: 12795411_245518655786626_438499590566984...ae1e5ed8d8]Fortaleza de Santa Tecla
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
#3
Ciudadela de Montevideo

[Imagen: 12799300_245522845786207_730240296714232...e=57526841]
Real de San Felipe y Santiago de Montevideo

Para 1730 Montevideo ya se constituía como vigía de España en el Plata. A la muralla que formaban con su sola presencia sus moradores se decidió agregar fortificaciones. En octubre de 1741 se inició la construcción de la Ciudadela. No estaba en el lugar previsto originalmente, sino en uno harto desfavorable, dominado por una colina cercana.

 Recién en 1770 los informes oficiales comenzaron a reconocer lo mal ubicado que se encontraba. La obra se dio por terminada en 1780. Sus muros se elevaban unos nueve metros de altura y tenían seis metros de espesor. Contaba con unas cincuenta piezas de artillería distribuidas en cuatro baluartes: San Felipe, Santa Isabel, San Fernando y Santa Bárbara. Sus instalaciones incluían alojamiento para diez compañías de infantería, capellanes, oficiales, comandante y gobernador de la plaza fuerte.



Estaba provista de dos aljibes y embalses exteriores cercanos, cubiertos por el tiro de mosquete, para el suministro de agua. Contaba también con depósitos para víveres y pertrechos, polvorín y hospital. La defensa de la ciudad se completaba con todo un perímetro amurallado y varios bastiones.


[Imagen: 12832523_245522022452956_820683170037685...e=57807EB5]
Murallas de Montevideo, al frente, su Ciudadela

[Imagen: Maqueta%20Ciudadela.jpg]
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
#4
La Ciudadela de Montevideo (2da parte)

*Extraído de “Viaje al antiguo Montevideo” de Carlos Menck Freire y Juan Antonio Varese

Ubicación: Mitad sudoeste de la Plaza Independencia.
Técnico: Ingeniero Militar Diego Cardoso.

Bruno M. de Zabala encomendó al Ing. Petrarca la planificación de la defensa de la ciudad.
En octubre de 1725 Zabala informaba al Rey que había concluido la confección de los planos de un fuerte, (hoy, Plaza Zabala), al que llamaba “Fuerte Grande”, para diferenciarlo de la batería de San Felipe (1).


Real de San Felipe y Santiago de Montevideo

Pero dicho fuerte, al año siguiente perdió su razón de ser, al extenderse la ciudad hacia el este.
En 1727 el Ing. Petrarca volvió a confeccionar un nuevo plano, donde el Fuerte Grande o Ciudadela se construiría en un lugar más adecuado, lo alto de la Cuchilla Grande, la actual intersección de la Av. 18 de Julio y la calle Río Negro. Los planos y cálculo de costos fueron enviados al Rey, para su aprobación. Este proyecto fue observado por el ingeniero General Marqués de Verbom, iniciándose una larga discusión técnica por correspondencia entre ambos. Esta discusión así como la falta de recursos de la Corona prolongaron la construcción del fuerte hasta después de la muerte de Petrarca, ocurrida en agosto de 1736.

[Imagen: 12419293_257417464596745_6054094197872030672_o.jpg]La Ciudadela - Pintura original (parcial) de Carlos Menck Freire

 - Imponente fortaleza construida con sillares de granito gris, de más de 6 metros de espesor por 10 metros de altura. Según los técnicos militares españoles se trataba de la más importante fortaleza amurallada situada al sur del Callao.
El Rey nombró como sucesor al Ing. Militar Diego Cardoso, quien confeccionó un nuevo proyecto de fortificación, colocando el fuerte a construirse en un lugar intermedio (donde realmente se construyó). Proyecto con un costo sensiblemente inferior, pero evidentemente en un lugar no apropiado, porque terminó ahogando el crecimiento y desarrollo de la ciudad, estratificándolo dentro de las murallas.
Según W. Reyes Abadie y Andrés Vázquez Romero, “Crónica General del Uruguay” (obra citada), Vol. II, Pág. 10 (Ediciones de la Banda Oriental - 1999): “Se desconocen los motivos que indujeron a Cardoso a cambiar el lugar elegido anteriormente por Petrarca y Zabala, estratégicamente muy superior, y además la ubicación ´natural´ dada por la configuración del terreno, demostrando así una clara falta de criterio militar en lo que atañe a las ´reglas de una buena fortificación´, con fatales consecuencias muchos decenios más tarde”.

[Imagen: 12671854_257519147919910_8605285562327628168_o.jpg]Plano de la ciudad de Montevideo

Cardoso presentó varios planos hasta lograr su aprobación definitiva el 25 de enero de 1745.
Descripción: La Ciudadela era de planta cuadrada con un baluarte en cada ángulo y una plaza de armas en su interior. Constaba de cuatro baluartes, a saber: Santa Isabel (de la Reina), San Felipe (del Rey), San Fernando (del Príncipe) y Santa Bárbara (de la Princesa). Los muros tenían una altura de 10 metros y un espesor de 6. Todo el conjunto estaba rodeado de un ancho foso, de 17 metros de ancho y 13 de profundidad, a cuyos bordes se extendían terraplenes defensivos. La superficie central era un cuadrado de 100 mts. de lado, alcanzando a 150 con los baluartes.

[Imagen: 12888639_257417811263377_4037922848685432448_o.jpg]Esquema de la Ciudadela: 1) Puerta (puente levadizo) - 2) Capilla - 3) Plaza de Armas - 4) Baluarte de Santa Isabel - 5) Baluarte de San Felipe - 6) Baluarte de Santa Bárbara - 7) Baluarte de San Fernando. Medidas: - 145 mts. de extremo a extremo de los baluartes - La Plaza de Armas, casi cuadrada, medía 79 mts. (N. a s.) por 72 mts. (E. a O.)

 - La Plaza de Armas estaba rodeada por cuatro filas de crujías.
Se accedía a la fortaleza a través de una única puerta, del lado de la ciudad, que comunicaba con la calle de San Carlos (actual Sarandí), conocida desde siempre como “Puerta de la Ciudadela”.
Sobre el frente opuesto a la puerta se disponía una capilla, con forma de cruz griega, para el servicio religioso de la guarnición.
Se ha discutido mucho sobre la efectividad del sistema defensivo de Montevideo.
¿Eran realmente inexpugnables las murallas tal cual se enorgullecían las autoridades españolas?
Si bien las tropas inglesas asaltaron y tomaron la ciudad, penetrando tras ardua lucha por la brecha abierta en las proximidades del Cubo del Sur, (ciertamente el punto más vulnerable), no debemos olvidar dos factores:
1) que se trataba de un ejército disciplinado y provisto de moderno armamento y
2) que el asalto por tierra estuvo precedido de un fuerte bombardeo desde el mar, puesto que las naves inglesas, con grave riesgo de encallamiento y consiguiente naufragio, se aproximaron a las restingas de la costa sur para disponer de un mejor ángulo de tiro.
Historia:
- 1741, 13 de octubre. Comenzó la construcción de la Ciudadela.
Según Isidoro de María y otras fuentes consultadas la piedra fundamental se colocó el 1° de mayo de 1742, siendo bendecida la ceremonia por el Padre José Cordobés.

[Imagen: 12672083_257521311253027_2768652244349971719_o.jpg]Plano de Montevideo y sus fortificaciones a comienzos del siglo XIX *

La obra se inició con el concurso de mil indios Tapes llegados de las Misiones Jesuíticas.
- 1745, 25 de enero. Aprobación de los planos presentados por el Ing. Militar Diego Cardoso.
- 1780. Fecha aproximada de su terminación.
- 1807, 03 de febrero. Don Pascual Ruiz Huidobro, Gobernador de Montevideo, atrincherado en la Ciudadela, luego de valiente defensa, se rindió a las tropas inglesas del Gral. Auchmuty.
- 1815, 26 de marzo. Fernando Otorgués enarboló la bandera artiguista sobre la puerta de la Ciudadela. Y para borrar todo vestigio “de los godos”, mandó a destruir a golpes de martillo el escudo de piedra con el emblema español.
- 1829, 25 de agosto. La Honorable Asamblea General Constituyente y Legislativa del flamante Estado Oriental, aprobó la demolición de las murallas de Montevideo y Colonia.
La primer medida fue dejar abiertos los portones durante la noche, para que fuese más libre la comunicación entre sus habitantes y los de la campaña.

[Imagen: 12916926_257511084587383_5081218999429353775_o.jpg]La Ciudadela de Montevideo

 - En primer plano se aprecia el Parque de Ingenieros y la línea de fortificaciones que terminaba en el cubo del Norte. A la derecha la batería de San Sebastían, que se prolongaba hasta el cubo del Sur.
Un detalle curioso: dos extranjeros fueron los que comenzaron, simbólicamente, el acto de demolición. Veamos una sabrosa crónica de época, aparecida en “El Universal” del 28 de agosto de 1829:
“El señor Don Tomás Mendenhall, natural de Norte América y Don Sebastián Jiménez, natural de España, fuimos los primeros que, a pesar de nuestra ancianidad, el día 27 de Agosto de 1829 subimos nuestros caducos cuerpos a la muralla, con alguna dificultad, pues uno y otro pasamos de los 60 años y arrancando una piedra de ella, la arrojamos al foso con varias reflecciones relativas al deseo de felicidad y la humanidad y deseosos que así conste, firmamos la presente ut supra”.

[Imagen: 12916377_257451521260006_8909334343329595684_o.jpg]Interior de la Ciudadela

 - En primer plano podemos ver la capilla y a la derecha dependencias militares
- 1833. Se demolieron los baluartes y se cegó el foso perimetral de la Ciudadela, practicándose una abertura de E. a O. a través de la capilla, para comunicar la Ciudad Vieja con la Plaza Independencia.
- 1836, 1° de mayo. Se inauguró el Mercado Público dentro del área de la antigua Ciudadela conocido como Mercado Nuevo; más tarde y hasta su demolición fue llamado “Viejo”.
- 1877/79. Demolición total para ampliación de la Plaza Independencia.
- 1890. La portada, que comunica con la calle Sarandí, fue colocada en la fachada sur de la recién inaugurada Escuela de Artes y Oficios, sobre la calle Gonzalo Ramírez.

[Imagen: 12916206_257503981254760_665727740361487522_o.jpg]Puerta de la Ciudadela

 - Sobre la izquierda puede verse el Parque de Ingenieros. Al frente, la Puerta de la Ciudadela, único medio de acceso al Fuerte.
- 1959. La portada fue restituida a su primitivo emplazamiento, tras prolijos estudios del Arq. Ernesto Monestier.
- 1975. La portada fue declarada Monumento Histórico Nacional, según Resolución del 8 de Julio de 1975, dictada en base a la ley N° 14.040 del 29 de Octubre de 1971, que dispuso la creación de la Comisión Nacional del Patrimonio Histórico, Artístico y Cultural de la Nación.

[Imagen: 12916934_257418674596624_8408224525990935012_o.jpg]Puerta de la Ciudadela

- La portada, emplazada en su antiguo lugar, se conserva actualmente, como último vestigio de la imponente fortaleza.

Cubo del Sur
(Batería de San Fernando)
Ubicación: Rambla Gran Bretaña y calle 33.
Técnico: Ing. Militares Francisco Rodríguez Cardoso, José Pérez Brito y planos de José del Poso y Marquy.
Historia:
- 1770. Se tienen informes de haberse construido una fortificación.
- 1790. Se mejoran las defensas.
- 1808. Ampliación y fortificación durante el gobierno de Elío.
- 1841. El gobierno vendió el terreno a José Sagra y Periz; luego fue adquirido por Samuel Lafone, quien lo donó para la construcción del Templo Inglés.
- 1844. En su lugar se erigió la Iglesia Episcopal Británica (Templo Inglés).
- 1934. Demolición para construir la Rambla Sur.
- 1945. Reconstrucción del parapeto del antiguo Cubo del Sur.
- 1975. Declaración de Monumento Histórico Nacional.

[Imagen: 12898286_257492601255898_5021992763181906043_o.jpg]Vista nocturna de las murallas de Montevideo - (al centro el Portón de San Pedro)

Notas:
(1) Batería baja de tierra y fagina, armada de 6 cañones (en otros textos indican 10 cañones), construida por el Ing. Domingo Petrarca entre 1724 y 1741. Estaba ubicada en el ángulo formado por las calles Cerrito, Piedras, Guaraní y la costa de la bahía de Montevideo. Se la modificó, rodeándola de gruesos muros de piedra en 1746 y se le instalaron 30 cañones, dándole el nombre de Fuerte de San José. Se demolió completamente en 1880.

[Imagen: 12898272_257416101263548_2686126735058495500_o.jpg]Fuerte de San José

- Fortificación de piedra ubicada en la punta noroeste de la península, dominando la entrada de la bahía y parte de la costa sur. Durante la época española los muros estaban rodeados de un ancho foso, que fue cegado en años posteriores.
* Plano de Montevideo y sus fortificaciones a comienzos del siglo XIX
Guía de la antigua ciudad
Fortificaciones: 1) Ciudadela - 2) Puerta de la Ciudadela - 3) Cuartel de Ingenieros - 4) Parque de Artilleros - 5) Portón Nuevo (de San Juan) - 6) Cubo del Sur - 7) Fuerte de San José - 8) Las Bóvedas - 9) Cubo del Norte - 10) Portón Viejo (de San Pedro)
Edificios: A) Plaza Matriz - B) Cabildo y Reales Cárceles - C) Catedral - D) Capilla de los Jesuitas - E) Casa de Comedias - F) Hospital de Caridad - G) Capilla de la Caridad - H) El Fuerte - I) Capilla y Convento de los Franciscanos - J) Muelle Viejo - K) Apostadero Naval
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
#5
Fortaleza del Cerro

Ubicación: Cumbre del cerro de Montevideo
Técnico: Ing. Militar José del Pozo y Marquy

Ubicada en el Cerro de Montevideo a 134 metros sobre el nivel del mar, en el lado opuesto de la bahía, su función era la defensa de la población de Montevideo y su puerto.

En 1781 fue establecido un vigía en el Cerro con la función de observación de aquel trecho de la costa.
El 3 de febrero de 1807, tropas británicas al mando del coronel Sir  Samuel Auchmuty y del almirante Sir Charles Stirling ocuparon Montevideo, que sería reconquistada el 9 de septiembre del mismo año, sobre la rendición de  John Whitelocke con los ejércitos compuestos de orientales y porteños.
Posteriormente, la secuencia de las luchas por la independencia y durante el levantamiento revolucionario de las Provincias Unidas del Rio de la Plata, Montevideo se mantiene fiel a las autoridades españolas.
Fue en ese contexto que se construyó la Fortaleza del Cerro, iniciado en 1809, con el objetivo de proteger el  faro recién instalado (que se encuentra a 148 metros encima del nivel del mar), y de reforzar las defensas de la ciudad después de las Invasiones Inglesas.
Como proyecto del ingeniero militar Jose del Pozo la fortificación fue concluida en 1811, en el gobierno español de Francisco Javier de Elio.

[Imagen: 200px-PlanoFortalezaMontevideo1.JPG]

[Imagen: 200px-PlanoFortalezaMontevideo2.JPG]
...
Historia:
- 1799, 30 de setiembre. Por Real Orden se dispuso la construcción de un faro en la cúpula del cerro de Montevideo. Lo primero que se hizo fue la "Casa del piloto de la Vigía", para alojamiento del personal y farola, precisamente la dibujada en la imagen adjunta
- 1802, 04 de abril. Inauguración del faro, el primero que alumbró las aguas del Río de la Plata
- 1809/11. Construcción de una fortaleza para protección del faro. Se trata de un recinto de forma pentagonal, que ocupa una superficie de casi 700 metros cuadrados
- 1931/39. Se restauró la fortaleza, respetándose los planos originales
- 1939, 12 de octubre. Museo Militar General Artigas
[Imagen: 509_001.jpg]
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
#6
LAS HUELLAS DE LA BANDA ORIENTAL
Hallan en Cerro Largo vestigios del histórico "Fuerte de Borbón"
Fue uno de los últimos baluartes del Rey Fernando VII en la Banda Oriental.
FOTO

[Imagen: 57523a306597f.jpg]
Excavaciones por efectivos del ejército. Foto: Walter Garrido

NÉSTOR ARAÚJO04 jun 2016
Un grupo de historiadores junto con efectivos del Ejército creen haber hallado, después de muchos años de búsqueda, la ubicación del último fuerte de la conquista española.
El profesor Germán Gil señaló a El País que "hace 203 años, en las cercanías de la actual ciudad de Río Branco, departamento de Cerro Largo, existió un emplazamiento denominado "Fuerte de Borbón", en honor a la lealtad y defensa de la monarquía española. Quizá el último lugar de la campaña de la Banda Oriental, donde se izó la bandera española".

Este fuerte tuvo una significación mucho mayor de lo que daría a entender su corta vida, ya que sólo permaneció un año.
Las construcciones de la fortificación se iniciaron en el año 1812 y desaparecieron en la bruma de la historia el 21 de mayo de 1813. Se ubican en una rinconada de las márgenes del río Yaguarón de la entonces Banda Oriental, zona limítrofe con el imperio portugués, en tierras que hoy pertenecen al departamento de Cerro Largo.
El "Fuerte de Borbón" constituye parte de la historia y pretenden que integre el acervo del patrimonio del departamento de Cerro Largo.
Un equipo de trabajo liderado por Germán Gil Villamil, Daniel Marrero, Diego Sosa y María Bentancor se comprometieron a investigar y la tarea que demandó muchos años.
El historiador sostuvo que el desafío finalmente fue cumplido tras un denodado trabajo del Jefe del Regimiento de Caballería Mecanizado N° 7 de la ciudad de Río Branco, Walter Garrido, personal superior y subalterno dedicado a esta causa, y contó también con apoyo del Gobierno Departamental.
Excavaciones.
"Se realizó en primera instancia el estudio de mapas y fuentes documentales, para luego definir su ubicación geográfica posible y confirmarla mediante las excavaciones", dijo Germán Gil.
Se accedió a la autorización del propietario del lugar, para luego dar comienzo al trabajo de campo.
"En el recorrido por el terreno delimitado, quedó demostrado que el trabajo del historiador Flavio García, aunque correctísimo en su formulación, adolecía de errores en su ubicación", agregó Gil. Efectivamente, la cartografía española y portuguesa coincide con el lugar definido y encontrado por nuestro grupo de trabajo".
Indicó el historiador que las excavaciones comenzaron el pasado mes de mayo. "En una primera etapa se encontró restos de carbón enterrados a más de 60 centímetros de profundidad, así como trozos de losas y parte de vasija de barro, todo lo cual se encuentra en el Regimiento de Caballería N° 7 de Río Branco".

Este material y el cotejo con los planos, demuestra que el lugar delimitado era el correcto. El teniente coronel Walter Garrido informó a El País que la construcción era de barro, adobe y paja, por lo que no se halló ninguna pared debido a que el tiempo se encargó de borrar esos rastros", sostuvo.
Se planificó una segunda etapa de excavaciones y búsqueda de campo, a realizarse en el curso de este mes, indicó Garrido.

Historia.
Felipe Contucci, de origen portugués y muy vinculado a las autoridades portuguesas, españolas y orientales de la época, fue quien lideró y planeó como estrategia política la construcción del "Fuerte de Borbón".
Fue apoyado entre otros por Joaquín de Paz, el último comandante de la Guardia del Cerro Largo, y por Zenández, ambos españoles y defensores de la monarquía.
El proceso independentista iniciado en la Banda Oriental en 1811 después del "Grito de Asencio", encontraría en el "Fuerte de Borbón" uno de los últimos baluartes defensores establecidos sobre el límite fluvial, del régimen monárquico encabezado en esa época por el Rey Fernando VII y su hermana mayor, la princesa Carlota Joaquina.

[Imagen: 57523b9495272.jpg]
Ilustración del Fuerte de Borbón

Fue incendiado y abandonado.
Mientras en octubre de 1812 se iniciaba el segundo sitio a la Montevideo española por el ejército de Rondeau, en el este de la Banda Oriental se acentuaba una postura de defensa a los intereses borbónicos. Rondeau resolvió enfrentarse a los defensores del "Fuerte de Borbón" y con tal fin, el 27 de abril de 1813 partió desde Montevideo una expedición integrada por 130 hombres, a cargo del Coronel del Regimiento N° 3, Domingo French.
El 11 de mayo de 1813, llegaron a las cercanías del fuerte e intimaron a la rendición, pero la suerte la resolvieron las armas. El enfrentamiento entre el ejército revolucionario de French y los defensores del "Fuerte de Borbón", liderados por Contucci y Paz, no permitió una conclusión definitiva. El fuerte no pudo ser ocupado. "Los fosos, murallas, parapetos y el intenso fuego de los defensores frustraron todo intento en esa ocasión.
French dispuso el retiro de su ejército a Melo para reorganizarse y proyectar un nuevo ataque, solicitando refuerzo de hombre y de municiones.

El nuevo ataque nunca se concretó, ya que el 21 de mayo de 1813 el "Fuerte de Borbón" fue incendiado y abandonado por sus defensores.
Los jefes del fuerte y muchas familias pasaron para dominios de Portugal, llevando también documentos de archivos, entre ellos libros con datos poblacionales de Melo, recuperados años más tarde.
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
#7
Plaza fuerte de la Colonia del Sacramento

[Imagen: puerta2.jpg]

Antecedentes historicos
Fundacion de la ciudad

El Gobernador de Río de Janeiro, Maestre de Campo Don Manuel de Lobo arriba a la Península de San Gabriel, al frente de 5 naves, comenzando, el 26 de enero de 1680, el proceso fundacional de la Colonia do Sacramento. 
De destacada posicion estrategica,frente a Buenos Aires y en un territorio perteneciente a la corona de España, fue desde su fundacion misma un objeto de disputa entre España y Portugal.
Manuel de Lobo y su segundo al mando Manuel de Galvao contaban con una guarnicion militar de 200 soldados. 

[Imagen: 00449_004187.jpg]
Regimiento de la Plaza de Colonia del Sacramento 

[Imagen: colonia_sacramento_1.jpg]
Primeras fortificaciones portuguesas construidas por Manuel de Lobo


Enterados los españoles, el Consejo de Indias aprueba “Arrojar al invasor a sangre y fuego de la Colonia”, y el 6 de agosto de 1680, el Gobernador español de Buenos Aires, Joseph De Garro asalta y toma el poblado de Colonia del Sacramento, poniendo el primer Sitio a la ciudad. 
Las fuerzas hispanas estaban compuestas de aproximadamente 300 soldados españoles y 3.000 indios Tupíes los cuales eran conducidos en el combate por padres misioneros. 
La ciudad no puede resistir y capitula muriendo en los combates el comandante de la defensa, capitan Galvao y su esposa Johanna Galvao, quien murió protegiendo el cuerpo de su marido, herido de muerte en la lucha.
Mueren ademas 125 soldados portugueses, 5 españoles, 31 indios y 45 negros, tomándose a los portugueses 150 prisioneros y 6 mujeres.
[Imagen: 00449_002800.jpg]
 
Posteriormente ambas coronas se suceden en el control de Colonia del Sacramento lo que da lugar a la mejora de sus defensas asi como la instalacion en su extra muros de campamentos de los sitiadores. 
 
El lo que hoy se denomina “Ciudad Vieja” o “Barrio Histórico”, era el bastión amurallado que contaba con cuerpos de línea propios, como lo fue el “Regimiento da Praça da Colonia”, baluartes y bastiones fuertemente artillados, a la vez de ser un muy importante apostadero naval que, muy a pesar de su difícil acceso, controlaba el ingreso hacia el alto Paraná y el Uruguay, manteniendo a la vez una férrea visión de los sucesos que en Buenos Aires acontecían.
 
Esta plaza fuerte, contaba con alertas tempranas, las cuales se disponían entre Colonia y Montevideo, y hacia el norte de la ciudad, con la finalidad de alertar de la presencia de naves y tropas enemigas. 
Estas fuertes medidas en el orden bélico fueron parte del “Plan Cevallos”, y construidas entre los años 1762 y 1776.
 
Estas guardias que en la mayoria de los casos hoy conservan su nombre eran en realidad puestos de observacion, destacamentos y piquetes de caballería, que se ubicaban  desde Colonia al Este, encontrándose ubicadas en Riachuelo, Artilleros del Plata, Barra del Sauce [b](actual Juan Lacaze), Rosario, Paso de la Tranquera, Cufré y Estancia del Rey; y hacia el Norte, San Pedro, San Juan, Horqueta, Migueletes,  Víboras y Las Vacas (Carmelo).[/b]
 
Estas “Guardias” pasaban de ser en muchos casos de carácter provisorio a efectivo, llegando en el caso de Víboras a nuclear un importante grupo de vecinos en torno a ella, como así fue ocurriendo, más tardíamente, en los casos de Puerto Sauce (Juan L. Lacaze), Las Vacas (Carmelo), Rosario y Artilleros.

La Plaza Fuerte
Dentro de las obras defensivas de la plaza habia importantes bastiones artillados que defendían la ciudad de los ataques navales, como el Bastión de Santa Rita cuya artillería provocó el hundimiento del barco inglés Lord Clive en el año 1763. Complementando esas defensas fuera de los muros existian ademas  baterías navales (el caso de la batería de Rivera) sobre la costa del Río Uruguay e islas circundantes (San Gabriel, Martín García).

[Imagen: P-55.jpg]
El Lord Clyde arde victima de una "bala roja" disparada desde la bateria de Santa Rita


[Imagen: colonia-del-sacramento-1777-.jpg]


El Real de San Carlos
En el campo sitiador se llevo a cabo la formación de “Reales” y “Reductos”, ello como consecuencia de asentamientos militares en la periferia de la ciudad fuerte.   
En 1761, Don Pedro de Cevallos, comandante del campo de bloqueo sobre la Colonia portuguesa, funda el “Real de San Carlos”, disponiendo del nombre como homenaje al Rey de España.
 
No sólo el “Real”, que por definición es un campamento militar, va a contar con alojamientos para la tropa, sino que se ordena construir una capilla, casa para los oficiales y caballerizas; comenzando a llegar a visitar estos campos de sitio, los comerciantes con sus mercaderías, conocidos como “mercachifles”, incluso llegando a instalarse en pulperías en las zonas aledañas.
 
A la vez se sumaban las actividades religiosas y oficios en la capilla del Real, la cual recuerda a San Benito, conjuntamente con las primeras uniones conyugales, por lo general entre soldadesca y muchachas de la zona.  Y no era el Real un simple campamento militar, sino que comenzaba a cumplir un importante factor social, si bien no restándole mérito al orden religioso, pero que comenzaba a ser partícipe también de factores económicos.
 
Cercano a esta zona, se encontraban fuertemente custodiados los depósitos de pólvora, que dieron origen al establecimiento de soldados en su órbita, y llegando a agrupar luego a más de una decena de familias sobre lo que se conoce como “Cuchilla de la Pólvora”.




[Imagen: hpemib+%25281%2529.jpg]
Plaza fuerte y Real de San Carlos


Colonia del Sacramento en las Invasiones Inglesas
Colonia del Sacramento fue utilizada por las fuerzas españolas como base de operaciones para la Expedición Reconquistadora que al mando de Santiago de Liniers y Bremond parte en la tarde del 3 de agosto de 1806 hacia la zona del Tigre, para recuperar Buenos Aires  de las tropas británicas.
 En 1807, Colonia del Sacramento vuelve a adquirir trascendencia, con la ocupación de la misma por las fuerzas británicas, por lo que se destinan tropas a operar en la Banda oriental del Río de la Plata; entre estas fuerzas encontramos la presencia del Cuerpo de Patricios de Buenos Ayres.

Colonia del Sacramento en las luchas por nuestra independencia 
José Gervasio de Artigasrevistaba a órdenes de la Corona Española en Colonia en el año 1811, ahi se produce su "desercion" para presentarse ante la Junta de Buenos Aires poniendose al servicio de la causa de la indepencia.

Los vaivenes de la lucha por la independencia no fueron ajenos a Colonia alternandose en su dominio las fuerzas patriotas, portugueses y brasileños.
Como consecuancia de las acciones militares Colonia queda con parte tenía sus murallas derruidas, lo que llevaba a tener que disponer de partidas volantes y piquetes de vigilancia, para tratar de prevenir a la ciudad de un posible ataque.
 Si a esto le agregamos la creación de Hospitales de Sangre y nuevas líneas de comunicación entre guardias (caso de las guardias de Artilleros y San Juan, que dieron origen a la actual ruta 22) se conforma un nuevo mapa físico de la zona, como así lo fue también el Camino Real (antigua Ruta 1).

[Imagen: F3-36.jpg]

 
 
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
#8
Obras en la Plaza Zabala trajeron el hallazgo de restos del primer fuerte de Montevideo
La arqueóloga Virginia Mata sostuvo que ahora se buscará integrar los vestigios encontrados al paseo público.
miércoles, 11 octubre 2017
Introduzca el texto aquí
[Imagen: 59de4e393036a.jpeg]
Conferencia de prensa sobre el hallazgo. Foto: Ariel Colmegna.

La Intendencia de Montevideo informó que durante los trabajos de renovación de la Plaza Zabala (Ciudad Vieja) fueron descubiertos restos del primer fuerte de la ciudad.

Este mediodía se llevó a cabo una conferencia de prensa de la que participó el intendente Daniel Martínez junto a autoridades de la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación, la División Espacios Públicos de la comuna y el Departamento de Desarrollo Urbano.

La arqueóloga Virginia Mata dijo que se hizo un seguimiento de las obras que se estaban realizando y ante la expectativa de que hubiera un hallazgo arqueológico, trabajaron en conjunto la Comisión de Patrimonio y la Intendencia.

Apenas se levantaron las veredas, se encontraron las trazas de lo que eran las cimentaciones del fuerte y de la fachada. También se encontraron vestigios asociados a las construcciones internas del fuerte.

Ahora se buscan otros restos de fortificaciones y también de cerámica o vidrio. "Se busca la forma de ponerla en valor y de integrar estos vestigios al paseo público", manifestó la arqueóloga.
[Imagen: 59de0cbc2ce39.jpeg]
Antigua foto de la Plaza Zabala. Foto: Colección Caruso / Archivo El País

Según informaron desde el gobierno departamental, se encontraron los cimientos del fuerte proyectado por el ingeniero Francisco Petrarca, construido entre 1724 y 1725 para  la ciudad colonial, que en ese momento llevaba el nombre de San Felipe y Santiago de Montevideo.

En el siglo XVIII perdió su razón defensiva y fue utilizado para albergar reparticiones públicas, convirtiéndose en 1830 en casa de gobierno, hasta que en 1888 la construcción fue demolida por orden del presidente Lorenzo Latorre, conformándose en el lugar una plaza pública.

[Imagen: 59de23012d6b5.jpeg]
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
#9
El Cerro recupera una reliquia del siglo XVIII
La Casa de la Pólvora se construyó 15 años antes de que se iniciara la obra de la Fortaleza General Artigas.

ANDRÉS LÓPEZ REILLY
martes, 14 noviembre 2017
Introduzca el texto aquí
[Imagen: 5a0a2cef7d890.jpeg]
La Real Casa de la Pólvora está ubicada en Cibils y Burdeos, aproximadamente. Foto: M. Bonjour

Quince años antes de que se iniciara la construcción de la Fortaleza General Artigas, el Cerro de Montevideo contaba con una fortificación militar de gruesas murallas: la Casa de la Pólvora. Destinada en su originalmente a albergar unos 100.000 kilogramos de este explosivo, la edificación tuvo distintos usos a lo largo de más de 200 años, siendo hoy una propiedad abandonada (en la década de 1990 funcionó allí una biblioteca) que pertenece al Ejército Nacional.

Tras varias tratativas con el Ministerio de Defensa, el Municipio A se encargará de recuperar la reliquia, lo cual costará unos 4 millones de pesos
"Se dice que es una de las tres Casas de la Pólvora que queda en Sudamérica. Hay una en Chile y otra en Perú", señala a El País el alcalde del Municipio A, Gabriel Otero.
"El edificio se mantiene bastante original en lo que refiere a sus paredes. El techo es liviano y de dos aguas, como un dolmenit, y lo habrán puesto hace 30 o 40 años. Se pretende que la recuperación sea lo más fiel a lo original. Y tiene que tener un uso del tipo turístico, porque las instalaciones no bancan una asiduidad. Por ejemplo, se lo puede utilizar para hacer muestras", indicó Otero.

Según el sitio Fortalezas.org, que compila la historia de distintas fortificaciones alrededor del mundo, la Casa de la Pólvora fue recuperada por el coronel retirado Ángel Corrales Elhordoy en 1986, basándose en el plano del edificio realizado por el ingeniero militar Bernardo Lecocq a fines del siglo XVIII.
El edificio está en la manzana delimitada por las calles Bulgaria, Burdeos, Perú y Cibils.
Su planta es rectangular, de 30 x 6 metros, y tiene gruesas paredes con dos aberturas: una puerta al noreste y una ventana al suroeste. Las paredes laterales tienen seis respiraderos, destinados fundamentalmente a la ventilación de la pólvora.

El techo esta realizado a dos aguas originalmente en tejas "musleras", de mayor tamaño que las que se fabrican hoy. "Posiblemente, y como era costumbre en la época, el edificio tuviera una doble cubierta en la techumbre, para asegurar el material explosivo contra filtraciones e incluso ataques con material artillero, como se puede observar hasta hoy en el polvorín de la Fortaleza de Santa Teresa", explica el portal.
El edificio se encuentra rodeado de un alto muro de ladrillo del tipo "colonial" con entrada por una de las paredes de mayor extensión.

Escuela.
La construcción está rodeada por un terreno considerable y junto una escuela conocida como "del polvorín".
"El proyecto que nosotros hicimos fue con los gurises de sexto año de la escuela, del año 2015. Lo iniciamos con ellos y lo trabajamos con las maestras y la directora. Además de la restauración, queremos dejar para el término de esta administración un parque con una plaza", explicó Otero.
El alcalde informó que el acuerdo al que se llegó con el Ministerio de Defensa incluye la habilitación de una vivienda "para que pueda vivir un soldado de tropa y mantener una presencia en el lugar".

Un polvorín que incluía pararrayos.
La Real Casa de la Pólvora está ubicada en Cibils y Burdeos aproximadamente, y es una de las tres que han sobrevivido en Latinoamérica. En dos de sus ángulos (sur y norte), hay estructuras que serían pararrayos destinados a evitar el peligro de una explosión accidental a causa de una tormenta eléctrica. Estas "mejoras" fueron colocadas casi 100 años después.
“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
#10
Museo Fortaleza «Gral. Artigas» es la última gran obra de ingeniería militar española en el Río de la Plata
Creación: 01/10/2021
Última Actualización: 01/10/2021



El Museo Fortaleza «Gral. Artigas», exhibe armamentos, piezas de artillería de la época colonial. Ubicado en el Cerro de Montevideo, está abierto a todo público de lunes a domingo de 10 a 19 horas.
[Imagen: 26112020-DSC_9000_0.jpg]
«El museo como tal, se inaugura el 12 de octubre de 1939, luego de su restauración», explica el magíster en Historia, José Olivero, jefe de la División Historia del Departamento de Estudios Históricos del Estado Mayor del Ejército.

Historia
«La creación del museo se plantea desde 1916, lo que pasa que en ese momento era una fortaleza activa», agrega Olivero.
En 1931 se declara Monumento Histórico Nacional, y se empieza su restauración para convertirlo en museo. A partir de 1939 su actividad ha sido constante.
«En la fortaleza es tan importante -o más- la edificación que lo que expone», explica el magister. Esta fortificación es la última gran obra de ingeniería militar española en el Río de la Plata, una de las tres grandes fortificaciones que sobreviven en nuestro territorio: el fuerte de San Miguel y la fortaleza de Santa Teresa».
«La fortaleza fue creada en el marco de las luchas contra los ingleses. En 1806 y 1807 habían reprimido las dos invasiones inglesas», cuenta Olivero. «En 1809 se decide que esta área necesita ser protegida, ya que incluía su estructura de faro, que era esencial para la navegación. Por lo cual, se inicia su construcción por orden del gobernador de Montevideo, Francisco de Elío que, en ese momento estaba en lucha con el virrey del Río de la Plata dentro del marco de las luchas napoleónicas», agrega.


El 21 de mayo de 1811, después de la Batalla de Las Piedras, ya se inicia el sitio de Montevideo, por lo cual la fortaleza entra en acción apenas más o menos terminada. Y no va a perder su carácter guerrero hasta 1930.
«La fortaleza tuvo muchas funciones: protegía el faro que ayudaba a la navegación, protegía la zona del Cerro que era una gran estancia del rey y posteriormente una estancia de la ciudad. Y alimentaba a Montevideo», narra el magíster Olivero. Agrega que «cuando había sitios en la ciudad no solamente servía para proteger esta zona de Montevideo o como para proteger el faro, sino de que partidas de avanzada traían ganado a la zona de defensa de la fortificación, lo faenaban y atravesaban la bahía, que también estaba protegida por la batería de la isla Libertad, alimentaban con carne a la ciudad»
Entre 1895 y 1907 la fortaleza también funcionó como una cárcel militar.


Colecciones y muestras
Es un museo monográfico, fundamentalmente expone armamentos. Pero además hay diferentes materiales de interés. «En la sala de recorrido regional, exponemos una serie de mapas que van del siglo XVI al siglo XIX, recordando no solamente el proceso de colonización, que partió desde la costa hacia el interior, sino que Montevideo, este cerro, fue un punto focal en ese descubrimiento», explica Olivero.
«El nombre de Montevideo no viene de la península. Viene de este sitio. Era el montevidi de la expedición de Magallanes de 1520. Referencia para los navegantes que avanzaban en el Río de la Plata», narra el asesor del DEH. «A lo largo del siglo XVII, XVIII, la ciudad está formando su nombre hasta llegar a lo que hoy conocemos como Montevideo».


En otra sala, también se puede apreciar la cápsula del tiempo del Ejército Nacional, que se inauguró en el año 2011, en el marco de los festejos por los 200 años de la institución castrense. Va a ser abierta en el 2111, y, a su vez, dentro mantiene cápsulas selladas con diferentes elementos de ese Ejército del 2011, considerando unidades, comandos, instituciones y servicios.


«Por otro lado, entre el armamento, tenemos piezas muy interesantes, material automático, semi automático como las nordelfells, que se usaron en 1870. O una ametralladora Browwing de bronce, muy rara a nivel mundial, de la cual la fuerza tiene dos ejemplares. Tenemos entre los fusiles diferentes modelos, incluido un fusil japonés, del siglo XVI. Una muestra de armamento desde las primeras épocas de la Independencia hasta el siglo XX. Por ejemplo, armamento de chispa, armamento de percusión, Remmington que fue arma oficial del Ejército a partir de 1876. Mausser, armamento oficial del Ejército a partir de 1894. 


Este armamento siguió vigente hasta 1950, que fue sustituido por el M1 Garán norteamericano y, posteriormente por el Fail», explica el magister.
«En la parte de armamento corto tenemos diferentes piezas, de las cuales se destacan armamento de duelo. Debemos recordar que el duelo fue legal entre 1920 y 1992. Y muchas veces estos duelos no solamente eran civiles sino algunas veces eran militares», agrega.
«También tenemos piezas de artillería que van del siglo XVII al siglo XX. Y una sala que recuerda al Gral. Artigas porque la fortaleza, debemos recordarlo, no solamente es una fortificación española. Pero en 1829 se convierte en símbolo de la fuerza y el escudo nacional».


«En 1882 cuando el gobierno de Máximo Santos trata de recuperar la imagen de Artigas, que en la educación pública uruguaya se lo trataba como un salteador y un asesino, une ese elemento de la fuerza que simbolizaba la fortaleza con esa imagen del prócer libertador de Artigas. Con lo cual nombra a esta fortificación con su nombre».
En el recorrido que se realiza, precisamente se cubren aspectos de la fortaleza, pero también aspectos del armamento, y de esa referencia de Artigas que es tan importante.
«En general, es un llamador, es el lugar más visible de Montevideo, y debemos recordar que incluso es un llamador por la bandera de Artigas que tiene en su mástil, que fue inaugurada al concluir la conmemoración de los festejos por los 200 años del inicio de la lucha independentista del Uruguay en 2015», cuenta Olivero.


Asociación de amigos de los museos militares
«En las actividades de los museos militares, que incluyen este, el Departamento de Estudios Históricos tiene una Asociación de amigos de los museos militares que también colabora en forma muy importante en su trabajo de conservación, recuperación y exposición», relata Olivero.
«Es un grupo formado por expertos entusiastas e investigadores que han contribuido con el departamento, en mejorar su exposición y también recuperar materiales. Incluso han realizado campañas autorizadas, de recuperación de materiales que se encuentran enterrados en el entorno de la fortificación. 


En esta fortaleza tenemos una vitrina que muestra algunos de esos elementos y que muestran no solo que el museo es un lugar de exposición, y un lugar de aprendizaje, sino que tiene una historia viva que se ha ido desarrollando por gente que vivió en este lugar, que perdió objetos cotidianos, que tuvo una historia. Y que no solamente debemos que pensar en las piedras, en las armas o en las telas, sino que debemos pensar en esas personas que habitaron y vivieron este lugar».

«Un museo es un elemento vivo, continuamente se están desarrollando proyectos, cambios de exposición, mejoramiento de la información. Incluso el Departamento de Estudios Históricos desarrolla un curso de gestores culturales en el cual una visita es a este museo, para precisamente, no solo enseñar lo que se está haciendo, sino intercambiar opiniones y aprender de las personas que vienen, que están relacionadas al tema, para poder mejorar nuestra exposición», explica Olivero.


Información
Los horarios del museo son de lunes a domingo, todos los días de la semana, de 10 a 19 horas.
Se realiza un protocolo, no pueden haber más de 15 visitantes a la vez, por esta situación de emergencia. Y se les toma la temperatura y se le toman los datos.
Hay un sistema de guías, que no es permanente, pero en caso de coordinarse visitas de grupos, fundamentalmente escolares y liceales, se realizan.


El Departamento de Estudios Históricos tiene un mail y una página web, fortalezas.ejercito.mil.uy a través del cual se pueden realizar las solicitudes para no solo información, sino de visitas guiadas y de diferentes coordinaciones relacionadas a los museos.
Dirección: Cerro de Montevideo
Teléfono: (598) 2313-67-16 / 2900-19-83




“Dulce et decorum est pro patria mori”
 
Reply
  


Salto de foro:


Browsing: 1 invitado(s)