02-09-2016, 01:26 AM
(Este mensaje fue modificado por última vez en: 02-09-2016, 01:27 AM por danny.)
XVI. La campaña de Viana (1751)
Para la década de 1750, los Charrúas -sin olvidar las derrotas anteriores y disgustados con que los españoles invadieran sus territorios de caza, para criar su propio ganado- volvieron a rebelarse.
El nuevo Gobernador, José Joaquín de Viana, había previsto que esto ocurriese y se anticipó a los hechos. Así, ordenó que el Sargento Mayor Manuel Domínguez, al mando de 220 hombres armados y provisiones para dos meses, entrase en campaña contra los Charrúas.
Esta vez, el rápido movimiento español sorprendió a los indígenas, que no se percataron de su presencia hasta que Domínguez capturó, a orillas del río Tacuarí, a un jefe que espiaba sus movimientos. El indio, sorprendido, delató la posición de los suyos (aunque poco después se suicidó por arrepentimiento). Pero el mal ya estaba hecho y las fuerzas de Domínguez cayeron sobre el campamento indígena causándoles muchos muertos y tomando 91 prisioneros. Pero los Charrúas, lejos de desalentarse, presentaron batalla en forma sorpresiva, saliendo de un monte, bien organizados y listos para combatir. El combate fue sangriento, pero esta vez los indios fueron totalmente derrotados.
Más tarde, Viana intervendría con gran éxito militar en la Campaña de las Misiones o Guerra guaranítica (1754 - 1756), una guerra sin sentido para entregar las Misiones Jesuíticas y sus leales indios Guaraníes a los enemigos de España (!).
Para la década de 1750, los Charrúas -sin olvidar las derrotas anteriores y disgustados con que los españoles invadieran sus territorios de caza, para criar su propio ganado- volvieron a rebelarse.
El nuevo Gobernador, José Joaquín de Viana, había previsto que esto ocurriese y se anticipó a los hechos. Así, ordenó que el Sargento Mayor Manuel Domínguez, al mando de 220 hombres armados y provisiones para dos meses, entrase en campaña contra los Charrúas.
Esta vez, el rápido movimiento español sorprendió a los indígenas, que no se percataron de su presencia hasta que Domínguez capturó, a orillas del río Tacuarí, a un jefe que espiaba sus movimientos. El indio, sorprendido, delató la posición de los suyos (aunque poco después se suicidó por arrepentimiento). Pero el mal ya estaba hecho y las fuerzas de Domínguez cayeron sobre el campamento indígena causándoles muchos muertos y tomando 91 prisioneros. Pero los Charrúas, lejos de desalentarse, presentaron batalla en forma sorpresiva, saliendo de un monte, bien organizados y listos para combatir. El combate fue sangriento, pero esta vez los indios fueron totalmente derrotados.
Más tarde, Viana intervendría con gran éxito militar en la Campaña de las Misiones o Guerra guaranítica (1754 - 1756), una guerra sin sentido para entregar las Misiones Jesuíticas y sus leales indios Guaraníes a los enemigos de España (!).
Los pueblos que olvidan su historia, están condenados a repetirla. - Marco Tulio Cicerón