08-21-2017, 09:53 PM
Elon Musk y 116 expertos piden a la ONU que frene la evolución de los robots asesinos
Advierten que estas armas podrían ser utilizadas por "déspotas y terroristas" y "hackeadas para comportarse de manera indeseable".
![[Imagen: musk10.jpg]](https://i11.servimg.com/u/f11/19/62/37/34/musk10.jpg)
Los mismos que dedican su vida y sus compañías en el desarrollo de la inteligencia artificial quieren limitar su uso en el terreno militar. Entre ellos, están el fundador de Tesla, Elon Musk, el emprendedor de DeepMind de Google, Mustafa Suleyman, y 115 expertos de 26 países. Todos ellos firmaron una carta dirigida a la ONU en contra de las armas letales autónomas como los aviones no tripulados y los tanques y ametralladoras automatizadas.
Los protagonistas de esta petición son conscientes del poder de las máquinas y de que su buen uso militar puede ayudar al ser humano en el campo de batalla y mejorar su seguridad en situaciones bélicas. “Casi todas las tecnologías se pueden utilizar para bien o para mal, y la inteligencia artificial no es diferente”, destacó Tody Walsh, profesor de inteligencia artificial de Scientia en la Universidad de Nueva Gales del Sur en Sydney.
Walsh señaló que la IA, que en un principio se creó para facilitar la vida de las personas, puede ayudar a resolver muchos de los problemas apremiantes que enfrenta la sociedad actual, como la desigualdad, la pobreza, los desafíos planteados por el cambio climático y la actual crisis financiera mundial.
Sin embargo, él y todos los participantes de la carta enviada a la ONU temen que --a pesar de sus útiles aplicaciones-- la creciente autonomía de la robótica se convierta en una amenaza para la existencia humana y contribuya a una mayor pérdida de vidas.
Según los expertos, la creación de las máquinas asesinas es una ‘tercera revolución en la guerra", después de la pólvora y las armas nucleares. "Cuando se abra la caja de Pandora, será difícil cerrarla", advirtieron en el encuentro.
Además, creen que "una vez desarrolladas, las armas autónomas letales permitirán que los conflictos armados se libren a una escala mayor que nunca, y a escalas de tiempo más rápidas de lo que los humanos pueden comprender. Estos pueden ser armas de terror, armas que los déspotas y los terroristas usan contra poblaciones inocentes, y armas cortadas para comportarse de manera indeseable".
Por ahora, expertos de 26 países apoyan la carta presentada para que la Convención sobre Armas Convencionales de la ONU prohíba de manera preventiva armamento completamente autónomo. Pero esta no es la primera vez que la Conferencia Internacional Conjunta sobre Inteligencia Artificial --una de las reuniones mundiales más importantes de la IA-- fue usada como plataforma para discutir estos temas.
Hace dos años, la reunión internacional se hizo en Buenos Aires y se utilizó para lanzar una carta abierta firmada por miles de investigadores de AI y robótica, entre ellos Stephen Hawking y Elon Musk, que denomina públicamente a la IA como la "mayor amenaza existencial de la humanidad".
Aquella cita del 2015 ayudó a empujar a la ONU a realizar las primeras conversaciones formales sobre el creciente universo de la robótica y sus aplicaciones bélicas. También, contribuyó a crear consciencia de las posibles consecuencias irremediables que pueden provocar.
https://www.clarin.com/sociedad/elon-musk-116-expertos-piden-onu-frene-evolucion-robots-asesinos_0_ByqND8udb.html
Advierten que estas armas podrían ser utilizadas por "déspotas y terroristas" y "hackeadas para comportarse de manera indeseable".
Los mismos que dedican su vida y sus compañías en el desarrollo de la inteligencia artificial quieren limitar su uso en el terreno militar. Entre ellos, están el fundador de Tesla, Elon Musk, el emprendedor de DeepMind de Google, Mustafa Suleyman, y 115 expertos de 26 países. Todos ellos firmaron una carta dirigida a la ONU en contra de las armas letales autónomas como los aviones no tripulados y los tanques y ametralladoras automatizadas.
Los protagonistas de esta petición son conscientes del poder de las máquinas y de que su buen uso militar puede ayudar al ser humano en el campo de batalla y mejorar su seguridad en situaciones bélicas. “Casi todas las tecnologías se pueden utilizar para bien o para mal, y la inteligencia artificial no es diferente”, destacó Tody Walsh, profesor de inteligencia artificial de Scientia en la Universidad de Nueva Gales del Sur en Sydney.
Walsh señaló que la IA, que en un principio se creó para facilitar la vida de las personas, puede ayudar a resolver muchos de los problemas apremiantes que enfrenta la sociedad actual, como la desigualdad, la pobreza, los desafíos planteados por el cambio climático y la actual crisis financiera mundial.
Sin embargo, él y todos los participantes de la carta enviada a la ONU temen que --a pesar de sus útiles aplicaciones-- la creciente autonomía de la robótica se convierta en una amenaza para la existencia humana y contribuya a una mayor pérdida de vidas.
Según los expertos, la creación de las máquinas asesinas es una ‘tercera revolución en la guerra", después de la pólvora y las armas nucleares. "Cuando se abra la caja de Pandora, será difícil cerrarla", advirtieron en el encuentro.
Además, creen que "una vez desarrolladas, las armas autónomas letales permitirán que los conflictos armados se libren a una escala mayor que nunca, y a escalas de tiempo más rápidas de lo que los humanos pueden comprender. Estos pueden ser armas de terror, armas que los déspotas y los terroristas usan contra poblaciones inocentes, y armas cortadas para comportarse de manera indeseable".
Por ahora, expertos de 26 países apoyan la carta presentada para que la Convención sobre Armas Convencionales de la ONU prohíba de manera preventiva armamento completamente autónomo. Pero esta no es la primera vez que la Conferencia Internacional Conjunta sobre Inteligencia Artificial --una de las reuniones mundiales más importantes de la IA-- fue usada como plataforma para discutir estos temas.
Hace dos años, la reunión internacional se hizo en Buenos Aires y se utilizó para lanzar una carta abierta firmada por miles de investigadores de AI y robótica, entre ellos Stephen Hawking y Elon Musk, que denomina públicamente a la IA como la "mayor amenaza existencial de la humanidad".
Aquella cita del 2015 ayudó a empujar a la ONU a realizar las primeras conversaciones formales sobre el creciente universo de la robótica y sus aplicaciones bélicas. También, contribuyó a crear consciencia de las posibles consecuencias irremediables que pueden provocar.
https://www.clarin.com/sociedad/elon-musk-116-expertos-piden-onu-frene-evolucion-robots-asesinos_0_ByqND8udb.html
"Mas vale ser aguila un minuto que sapo la vida entera".