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OPV
(02-13-2016, 01:12 AM)navegante escribió: Coincido en que ahora sera las OPV...me extraño las declaraciones del subsecretario de Defensa en el dia de Prefectura. Al ser entrevistado por los medios de prensa dijo "estoy seguro que esas adquisiciones se haran" (opsssssss, tan seguro esta??...o sabe de algo y se lo tiene escondio?...jejeje, el pez por la boca muere).

Final Alemania vs Francia se sigue jugando

NAVEGANTE
Como dije hace tiempo: CHINOS OUT
 
(02-13-2016, 01:16 AM)navegante escribió: Me llego de buena fuente que hubo malestar ayer porque a la recepcion Oficial ofrecida por el buque frances, a la que fue el embajador y su sequito, no concurrio ni un solo Almirante de nuestra Armada. Amen de que dicho evento coincidio con el de la PNN, pero en este ultimo tampoco estaban todos los Almirantes.

Si fue para demostrar que no nos interesa el buque, creo que quedo claro.

NAVEGANTE

había algun almirante francés? porque al embajador lo atenderán de cancillería

me da la impresión de como dicen en fripur esta todo el pescado vendido tampoco esta bien hacerle un feo a marinos que vienen de otros lares no me importa el embajador si el cte del buque

el no nos interesa el buque es mucha gente no me incluya , no demuela puentes que los necesitamos y ya
 
Big Grin Y las famosas maniobras ? Jojojo
 
Transcribo la presentacion de DCNS en la Comision de Defensa:

La Comisión de Defensa Nacional del Senado tiene el inmenso gusto de recibir a los representantes de la empresa DCNS en las personas del ingeniero comercial Brian Girard, del Departamento de Ventas; del ingeniero Oliver Michel, Vicepresidente de Ventas para América Latina, y del doctor Mauricio Sorhuet, abogado y representante legal de la empresa.

Les damos la palabra.

SEÑOR MICHEL.- Buenas tardes a todos. Soy Olivier Michel, Vicepresidente de Ventas para América Latina de la empresa DCNS, el astillero francés de defensa.

Ante todo, me gustaría agradecer a los señores Senadores por habernos recibido.

Nuestro objetivo hoy es compartir con ustedes quiénes somos, a qué se dedica el grupo francés DCNS, cómo lo hace alrededor del mundo y, particularmente, las soluciones que podríamos brindar a la República Oriental del Uruguay frente a sus necesidades o agentes en materia de patrulleros de altamar.

Obviamente, la idea no es abrumarlos con detalles técnicos. Nuestros patrulleros cumplen totalmente con los requisitos técnicos de la Armada. De modo que preferimos enfocarnos en los puntos claves de nuestra oferta, los beneficios de tener la colaboración del grupo DCNS, así como la cooperación brindada por el Estado francés.

Como introducción, me siento orgulloso de decir que DCNS es uno de los líderes mundiales del segmento naval de defensa. La empresa nació en el año 1631 –hace ya algunos años– y desde esa época ha sido el principal proveedor de la Marina nacional francesa.

El grupo diseña, construye y mantiene sus buques, submarinos e infraestructuras portuarias. Nuestros productos ayudan diariamente a la marina francesa a la vigilancia y al control del territorio marítimo francés, el segundo más grande a nivel mundial después de los Estados Unidos, con más de 11.000:000.000 de kilómetros cuadrados.

Como ya mencioné, el grupo diseña, construye y mantiene en servicio una gama completa de naves militares, desde submarinos hasta buques de superficie, yendo desde el patrullero costero multiuso –como lo vemos en la diapositiva–, pasando por el patrullero de altamar o corbeta, y llegando hasta la fragata y el portaaviones, que es el buque más grande que construimos hoy en día en la empresa.

DCNS provee también servicios de apoyo a astilleros y bases navales. Al mismo tiempo, el grupo ofrece una amplia gama de soluciones en el ámbito de la energía nuclear civil y las energías marinas sostenibles.

El grupo DCNS cuenta hoy con 13.130 colaboradores, repartidos en 17 países, e involucra a más de 40.000 empleos indirectos.

El año pasado el grupo facturó € 3.100:000.000. La cartera de pedidos fue por € 13.200:000.000 y, la recepción de pedidos, por € 3.600:000.000. Cabe señalar que la internacionalización y la colaboración con los países es uno de nuestros pilares, sobre el cual tenemos una larga experiencia. Más tarde me referiré a este tema.

Proveemos productos y soluciones a cincuenta armadas en el mundo. Somos el principal participante en el componente naval de la fuerza de disuasión francesa. Consecuentemente, la alta tecnología y la confiabilidad son cruciales, tanto para nosotros como para nuestros clientes. Por esa razón, DCNS dedica anualmente un alto porcentaje a la investigación y al desarrollo.

Lógicamente, las reducciones de gastos que sufrieron gran parte de los países en los últimos años nos han obligado –tanto a nosotros como a nuestros clientes– a hacer más con menos recursos. ¿Cómo se traduce eso en la realidad? Primero, desarrollamos buques muy avanzados con equipos de última generación y con capacidades de rápida evolución para cubrir el mismo rango de misiones, pero con menos personal a bordo; segundo, integramos en las primeras fases del diseño el concepto de costo del ciclo de vida del producto, con el objetivo de tener un costo de operación y de mantenimiento lo más bajo posible.

Hoy nuestros buques y submarinos gozan de ser siempre de los más avanzados del mercado y ofrecen un mantenimiento simplificado. Este planteamiento se verifica con el OPV –sigla en inglés que significa Offshore Patrol Vessel–, que es una patrulla, que les presentamos hoy. Es el OPV 90 –luego lo veremos en la presentación–, clase L’Adroit. L’Adroit es un buque que fue diseñado con el objetivo de tener un patrullero compacto, muy moderno, con personal reducido y, sobre todo, multimisión.

El buque se beneficia de todo el saber hacer de DCNS en materia de buques militares como, por ejemplo, su sistema de combate muy avanzado. Ha desarrollado un sistema más amplio de vigilancia costera que deriva de los sistemas de combate a bordo de nuestras fragatas y portaaviones.

Las necesidades que se observan actualmente en el Uruguay corresponden a las que tienen varias marinas en el mundo y fueron tomadas en cuenta a la hora de concebir el patrullero L’Adroit. La primera de ellas es el control del territorio marítimo, que es una obligación para cada marina alrededor del mundo. Esto implica identificar, vigilar y estar en condiciones de intervenir, por ejemplo, para interceptar un barco en situación ilegal, socorrer, buscar y rescatar barcos o personas, proteger bienes y personas o, incluso, luchar contra la contaminación, averías o incendios.

No cumplir con esas obligaciones genera sobrecostos para el Estado y otros costos intangibles que comprometen al Gobierno. En el Uruguay a diario hay numerosos ejemplos que provocan sobrecostos para el Estado. Uno de ellos es la continua pesca ilegal en su territorio marítimo. Desconozco el costo ocasionado por este robo aquí, pero en Argentina las autoridades estiman que es de unos USD 1.500:000.000 anuales.

Otro ejemplo impactante es el de las primas de seguro. La capacidad de rescate o socorro tiene un impacto directo sobre las primas de seguro que pagan las compañías de transporte marítimo o los cruceros que arriban cada año al puerto de Montevideo y estos costos influyen sobre la competitividad del Uruguay.

También hay que destacar los sobrecostos de millones de dólares que hubo últimamente en las aguas uruguayas por el ancla de un barco que arrastró un cable de comunicaciones.

Por último, uno de los principales sobrecostos para el Estado uruguayo es el de la explotación offshore de los recursos naturales. En los próximos meses se iniciará la exploración de las reservas petrolíferas a 220 millas náuticas de la costa. Hace años que los expertos tienen identificada una fuente potencial de recursos para el Estado uruguayo y estiman que pronto serán numerosas las plataformas offshore al límite de la frontera marítima. Eso generará una fuerte obligación por parte del Estado, ya que deberá encargarse de la seguridad de las empresas y de sus actividades. En la mayoría de los países que cuentan con este tipo de plataformas, las armadas tienen la obligación de cubrir esas necesidades, sobre todo frente a posibles actos de piratería, como lamentablemente hay en otras partes del mundo. Las compañías petroleras deben contar con esos servicios que normalmente son brindados por los gobiernos. De no ser así, el costo de contratar esos servicios a empresas privadas impactará en la economía global del negocio.

Por todo lo anterior, es vital el control del territorio marítimo porque su no atención puede ocasionar sobrecostos colosales. Esta obligación casi se duplicará como consecuencia del pedido de Uruguay a la ONU para extender su territorio marítimo a 350 millas náuticas.

El segundo tipo de necesidades identificadas hoy en Uruguay nos lleva más allá del límite territorial, más precisamente a los acuerdos de la Zopacas y las actividades en la Antártida. Por los acuerdos de la Zopacas, Uruguay tiene hasta el medio del Atlántico Sur casi las mismas obligaciones de asistencia y control que posee en su territorio marítimo. Eso implica la necesidad de disponer de buques que naveguen en mares hostiles por lo menos 7.000 millas náuticas sin interrupción y con capacidades intrínsecas como, por ejemplo, la de tener a bordo un helicóptero para operaciones de búsqueda y rescate.

La Antártida, que los expertos llaman el mar Mediterráneo del siglo XXI, también requiere que el Estado uruguayo disponga de buques con capacidades de largo alcance y de nivel militar. La armada naval permite marcar presencia y, sobre todo, abastecer la base científica Artigas, cuya soberanía es importante mantener. Es evidente la necesidad de contar con una flota adecuada para cumplir con las obligaciones. De acuerdo a lo que se puede leer en la prensa, la Armada Nacional uruguaya contaría con una flota de buques de un promedio de cincuenta años y equipos de navegación de vigilancia o de intervención obsoletos e insuficientes. Se describe, además, una flota que no cuenta con más de cuatro buques capaces de alcanzar zonas azules. Zonas azules son zonas después de las 200 millas náuticas. De ser así, la Armada Nacional no dispondría de medios para asegurar el control del territorio marítimo uruguayo hasta el límite actual de 200 millas y, menos, a 350 millas. Tampoco podría cumplir con sus obligaciones hasta el medio del Atlántico o hasta la Antártida.

Por todo lo anterior y considerando los sobrecostos colosales que se ocasionarían, llegamos a la conclusión de que el Estado uruguayo necesita urgentemente equiparse con un barco multipropósito de última generación, con gran autonomía y características civiles pero también militares.

Estos buques serán los buques almirantes de la flota uruguaya que deberán cumplir misiones civiles y militares.

Frente a esta urgencia, la empresa DCNS realizó una oferta para proveer de tres buques al Estado uruguayo, en conformidad con los requerimientos de la Armada Nacional.

Antes de entrar en los detalles de nuestra oferta, queremos enfatizar el hecho de que tenemos la capacidad de entregar un buque de manera casi inmediata. El buque que podemos proveer es el patrullero L´Adroit, que en la actualidad está en operaciones en la marina francesa.

Como los señores Senadores pueden observar en la presentación, durante los últimos años L´Adroit fue involucrado en operaciones en varias partes del mundo y ha demostrado toda su confiabilidad en distintos teatros de operaciones, ya sean civiles o militares. A título de ejemplo, fue empleado para misiones humanitarias en el Líbano, para la protección de las plataformas petroleras en el Golfo de Guinea o en la intersección y el combate de piratas en el Canal de Mozambique.

Si bien la versión existente incluye un sistema de armamento liviano –lo cual es suficiente para la realización de las misiones actuales de la marina francesa–, puede ser reconfigurado con armamento más pesado el día en que el Estado uruguayo quiera equiparse para enfrentar otro tipo de amenazas.

Cabe mencionar que el buque ofrecido tiene poco uso y será entregado en perfectas condiciones. Contar a corto plazo con un buque, permite responder a las necesidades urgentes. Creemos que eso es más rentable para el Estado, aun considerando todos los sobrecostos ocasionados, que tener que esperar, por lo menos, dos años para que llegue un buque nuevo.

Desde el año 2013 hemos identificado la necesidad de Uruguay y su interés por el buque L´Adroit. Cabe señalar que varios países están interesados en este patrullero con disponibilidad casi inmediata.

No voy a entrar en detalles técnicos. Para mayor información les entregaremos carpetas que incluyen una presentación general de la empresa así como los puntos técnicos de nuestro buque.

Recordamos que nuestro OPV cumple con el 100% de los requisitos establecidos por la marina uruguaya y aún más. Creemos interesante enfatizar los puntos que consideramos esenciales.

Nuestro OPV 90 clase L’ Adroit tiene un alcance de 8.000 millas, que es superior a lo requerido por la Armada Nacional. Este alcance permite cumplir con las obligaciones de las Zopacas o mantener su presencia en la Antártida.

Además, tiene un hangar fijo para helicópteros, lo que permite proteger y realizar a bordo operaciones de mantenimiento.

Este último punto es primordial. Un helicóptero equipado para misiones de búsqueda y rescate tiene un rango de acción máximo de 140 millas náuticas, o sea unas 290 millas ida y vuelta. Los helicópteros no pueden brindar apoyo desde la costa a las plataformas offshore ubicadas a 200 millas; tampoco pueden cubrir el territorio marítimo hasta las 350 millas.

El helicóptero tiene que actuar y despegar desde un barco con altos riesgos de corrosión y los golpes de las olas sobre el puente. Incluso, a raíz de la operación de mantenimiento requerido por cualquier helicóptero, estos no se pueden dejar sin hangar por mucho tiempo, o sea que necesitan protección permanentemente. Al no tener un hangar a bordo, la Armada no podrá cumplir con sus obligaciones. Insistimos en el hecho de que estos patrulleros serán los buques almirantes y multiuso de la Armada. Deberán ser lo más completos que sea posible, ya que no contarán con el apoyo de otros buques de tipo portahelicópteros o buques más grandes que puedan existir.

Frente a la solicitud de la Armada en el mes de julio del presente año, DCNS hizo una oferta para tres buques construidos en Francia. Esta solicitud no incluía, a diferencia de la que había hecho antes el Ministerio de Defensa Nacional del Uruguay, la construcción local de un buque. Sin embargo, y como DCNS lo propuso al Estado uruguayo en el año 2014, reiteramos nuestra plena disposición en actualizar nuestra oferta e incluir la transferencia de tecnología tanto al astillero nacional –que llamamos el SCRA– como a la industria naval privada uruguaya, apuntando a la construcción total de un buque en Uruguay con nuestro apoyo y garantía.

La transferencia de tecnología es algo complejo, que no se improvisa y que ya está prevista desde la concepción del barco. Con el objetivo, desde el inicio, de apuntar a un mercado internacional, el diseño del OPV L’Adroit se concibió en bloques para que su producción pueda exportarse hacia afuera de Francia. A la fecha –y como podrán verlo en esta última diapositiva– estamos orgullosos de poder decir que tenemos una amplia experiencia de proyectos basados en transferencia de tecnología en varios países del mundo, que crearon miles de empleos muy calificados. Hoy contamos con socios y bases industriales sólidas en varios países; por ejemplo, Brasil e India para los submarinos Scorpene; Arabia Saudita, donde construimos fragatas conjuntamente con ese país; Egipto y Malasia, donde hemos vendido corbetas Gowind, etcétera.

Por el conocimiento que tenemos del mercado, sabemos que la mayoría de nuestros competidores no hacen una verdadera transferencia de producción, sino que limitan su transferencia a la capacitación para el mantenimiento o para realizar trabajos básicos en el país.

DCNS está plenamente consciente de que este proyecto, además de implicar grandes inversiones para el país, ofrece una oportunidad única para crear localmente numerosos empleos de fuerte valor agregado. A mediano plazo eso permitirá al país no solamente tener su independencia a la hora de operar y mantener su flota, sino también de disponer de toda la tecnología para armar su propia industria. Tenemos la capacidad y la voluntad de cumplir con el Decreto Nº 389/013, en el que se establece que se requiere el 20 % del monto del contrato en producción local. Hay que resaltar que el hecho de ofrecer transferencia de tecnología y construcción local no tendrá una incidencia que comprometa el proyecto en términos económicos.

Para concluir mi presentación y si me lo permiten, quisiera volver a la relación que tiene el DCNS con el Estado francés porque es algo fundamental. Somos una empresa privada que tiene al Estado francés como su mayor accionista. Por un lado, al ser una empresa de carácter privado, estamos sometidos a las reglas del mercado: competitividad, rentabilidad, inversión sistemática, etcétera y, por otro, contamos con todo el apoyo del Estado francés.

Además, la relación entre Francia y Uruguay, que siempre fue excelente, puede beneficiar este proyecto, además de brindar un acceso privilegiado a las tecnologías avanzadas tanto en el ámbito civil como militar.

Generalmente, los distintos equipos ofertados operan entre sí y son comprobados por nuestras fuerzas militares y autoridades civiles. Recordamos que en todas las ofertas realizadas ofrecimos una financiación, y estamos a disposición de las autoridades uruguayas para avanzar en sus condiciones, considerando que esta financiación podría beneficiarse del mecanismo de garantía del gobierno francés.

Agradezco nuevamente esta invitación para la presentación de nuestra empresa. Espero haber sido claro sobre lo que la empresa DCNS y el Estado francés pueden ofrecer a Uruguay a efectos de llevar a cabo este ambicioso proyecto.

Estamos a su disposición para contestar cualquier pregunta.

Muchas gracias.

SEÑOR PRESIDENTE.- Agradecemos su presencia y también el material que nos han dejado, que nos será de gran utilidad.

(Se retiran de sala los representantes de la empresa constructora naval francesa DCNS)
 
(02-12-2016, 11:16 PM)buitre66 escribió:
(02-12-2016, 11:02 PM)el_francotirador escribió: Pregunta: cuantos politicos, de esos que toman las decisiones, fueron a ver L'adroit al puerto?

usted tiene la respuesta gabriel ?


es relevante ?

Si, la respuesta es cero. El Ministro fue? El Subsecretario? Son los que van a dar el si o el no.... Los politicos van a votar o no el presupuesto para compralos.... Deberian interesarse no?
"All warfare is based on deception. There is no place where espionage is not used. Offer the enemy bait to lure him."
 
(02-13-2016, 02:54 AM)navegante escribió: Transcribo la presentacion de DCNS en la Comision de Defensa:

La Comisión de Defensa Nacional del Senado tiene el inmenso gusto de recibir a los representantes de la empresa DCNS en las personas del ingeniero comercial Brian Girard, del Departamento de Ventas; del ingeniero Oliver Michel, Vicepresidente de Ventas para América Latina, y del doctor Mauricio Sorhuet, abogado y representante legal de la empresa.

Les damos la palabra.

SEÑOR MICHEL.- Buenas tardes a todos. Soy Olivier Michel, Vicepresidente de Ventas para América Latina de la empresa DCNS, el astillero francés de defensa.

Ante todo, me gustaría agradecer a los señores Senadores por habernos recibido.

Nuestro objetivo hoy es compartir con ustedes quiénes somos, a qué se dedica el grupo francés DCNS, cómo lo hace alrededor del mundo y, particularmente, las soluciones que podríamos brindar a la República Oriental del Uruguay frente a sus necesidades o agentes en materia de patrulleros de altamar.

               Obviamente, la idea no es abrumarlos con detalles técnicos. Nuestros patrulleros cumplen totalmente con los requisitos técnicos de la Armada. De modo que preferimos enfocarnos en los puntos claves de nuestra oferta, los beneficios de tener la colaboración del grupo DCNS, así como la cooperación brindada por el Estado francés.

               Como introducción, me siento orgulloso de decir que DCNS es uno de los líderes mundiales del segmento naval de defensa. La empresa nació en el año 1631 –hace ya algunos años– y desde esa época ha sido el principal proveedor de la Marina nacional francesa.

               El grupo diseña, construye y mantiene sus buques, submarinos e infraestructuras portuarias. Nuestros productos ayudan diariamente a la marina francesa a la vigilancia y al control del territorio marítimo francés, el segundo más grande a nivel mundial después de los Estados Unidos, con más de 11.000:000.000 de kilómetros cuadrados.

               Como ya mencioné, el grupo diseña, construye y mantiene en servicio una gama completa de naves militares, desde submarinos hasta buques de superficie, yendo desde el patrullero costero multiuso –como lo vemos en la diapositiva–, pasando por el patrullero de altamar o corbeta, y llegando hasta la fragata y el portaaviones, que es el buque más grande que construimos hoy en día en la empresa.

               DCNS provee también servicios de apoyo a astilleros y bases navales. Al mismo tiempo, el grupo ofrece una amplia gama de soluciones en el ámbito de la energía nuclear civil y las energías marinas sostenibles.

               El grupo DCNS cuenta hoy con 13.130 colaboradores, repartidos en 17 países, e involucra a más de 40.000 empleos indirectos.

               El año pasado el grupo facturó € 3.100:000.000. La cartera de pedidos fue por € 13.200:000.000 y, la recepción de pedidos, por € 3.600:000.000. Cabe señalar que la internacionalización y la colaboración con los países es uno de nuestros pilares, sobre el cual tenemos una larga experiencia. Más tarde me referiré a este tema.

               Proveemos productos y soluciones a cincuenta armadas en el mundo. Somos el principal participante en el componente naval de la fuerza de disuasión francesa. Consecuentemente, la alta tecnología y la confiabilidad son cruciales, tanto para nosotros como para nuestros clientes. Por esa razón, DCNS dedica anualmente un alto porcentaje a la investigación y al desarrollo.

               Lógicamente, las reducciones de gastos que sufrieron gran parte de los países en los últimos años nos han obligado –tanto a nosotros como a nuestros clientes– a hacer más con menos recursos. ¿Cómo se traduce eso en la realidad? Primero, desarrollamos buques muy avanzados con equipos de última generación y con capacidades de rápida evolución para cubrir el mismo rango de misiones, pero con menos personal a bordo; segundo, integramos en las primeras fases del diseño el concepto de costo del ciclo de vida del producto, con el objetivo de tener un costo de operación y de mantenimiento lo más bajo posible.

               Hoy nuestros buques y submarinos gozan de ser siempre de los más avanzados del mercado y ofrecen un mantenimiento simplificado. Este planteamiento se verifica con el OPV –sigla en inglés que significa Offshore Patrol Vessel–, que es una patrulla, que les presentamos hoy. Es el OPV 90    –luego lo veremos en la presentación–, clase L’Adroit. L’Adroit es un buque que fue diseñado con el objetivo de tener un patrullero compacto, muy moderno, con personal reducido y, sobre todo, multimisión.

               El buque se beneficia de todo el saber hacer de DCNS en materia de buques militares como, por ejemplo, su sistema de combate muy avanzado. Ha desarrollado un sistema más amplio de vigilancia costera que deriva de los sistemas de combate a bordo de nuestras fragatas y portaaviones.

Las necesidades que se observan actualmente en el Uruguay corresponden a las que tienen varias marinas en el mundo y fueron tomadas en cuenta a la hora de concebir el patrullero L’Adroit. La primera de ellas es el control del territorio marítimo, que es una obligación para cada marina alrededor del mundo. Esto implica identificar, vigilar y estar en condiciones de intervenir, por ejemplo, para interceptar un barco en situación ilegal, socorrer, buscar y rescatar barcos o personas, proteger bienes y personas o, incluso, luchar contra la contaminación, averías o incendios.

No cumplir con esas obligaciones genera sobrecostos para el Estado y otros costos intangibles que comprometen al Gobierno. En el Uruguay a diario hay numerosos ejemplos que provocan sobrecostos para el Estado. Uno de ellos es la continua pesca ilegal en su territorio marítimo. Desconozco el costo ocasionado por este robo aquí, pero en Argentina las autoridades estiman que es de unos USD 1.500:000.000 anuales.

Otro ejemplo impactante es el de las primas de seguro. La capacidad de rescate o socorro tiene un impacto directo sobre las primas de seguro que pagan las compañías de transporte marítimo o los cruceros que arriban cada año al puerto de Montevideo y estos costos influyen sobre la competitividad del Uruguay.

También hay que destacar los sobrecostos de millones de dólares que hubo últimamente en las aguas uruguayas por el ancla de un barco que arrastró un cable de comunicaciones.

Por último, uno de los principales sobrecostos para el Estado uruguayo es el de la explotación offshore de los recursos naturales. En los próximos meses se iniciará la exploración de las reservas petrolíferas a 220 millas náuticas de la costa. Hace años que los expertos tienen identificada una fuente potencial de recursos para el Estado uruguayo y estiman que pronto serán numerosas las plataformas offshore al límite de la frontera marítima. Eso generará una fuerte obligación por parte del Estado, ya que deberá encargarse de la seguridad de las empresas y de sus actividades. En la mayoría de los países que cuentan con este tipo de plataformas, las armadas tienen la obligación de cubrir esas necesidades, sobre todo frente a posibles actos de piratería, como lamentablemente hay en otras partes del mundo. Las compañías petroleras deben contar con esos servicios que normalmente son brindados por los gobiernos. De no ser así, el costo de contratar esos servicios a empresas privadas impactará en la economía global del negocio.

Por todo lo anterior, es vital el control del territorio marítimo porque su no atención puede ocasionar sobrecostos colosales. Esta obligación casi se duplicará como consecuencia del pedido de Uruguay a la ONU para extender su territorio marítimo a 350 millas náuticas.

El segundo tipo de necesidades identificadas hoy en Uruguay nos lleva más allá del límite territorial, más precisamente a los acuerdos de la Zopacas y las actividades en la Antártida. Por los acuerdos de la Zopacas, Uruguay tiene hasta el medio del Atlántico Sur casi las mismas obligaciones de asistencia y control que posee en su territorio marítimo. Eso implica la necesidad de disponer de buques que naveguen en mares hostiles por lo menos 7.000 millas náuticas sin interrupción y con capacidades intrínsecas como, por ejemplo, la de tener a bordo un helicóptero para operaciones de búsqueda y rescate.

La Antártida, que los expertos llaman el mar Mediterráneo del siglo XXI, también requiere que el Estado uruguayo disponga de buques con capacidades de largo alcance y de nivel militar. La armada naval permite marcar presencia y, sobre todo, abastecer la base científica Artigas, cuya soberanía es importante mantener. Es evidente la necesidad de contar con una flota adecuada para cumplir con las obligaciones. De acuerdo a lo que se puede leer en la prensa, la Armada Nacional uruguaya contaría con una flota de buques de un promedio de cincuenta años y equipos de navegación de vigilancia o de intervención obsoletos e insuficientes. Se describe, además, una flota que no cuenta con más de cuatro buques capaces de alcanzar zonas azules. Zonas azules son zonas después de las 200 millas náuticas. De ser así, la Armada Nacional no dispondría de medios para asegurar el control del territorio marítimo uruguayo hasta el límite actual de 200 millas y, menos, a 350 millas. Tampoco podría cumplir con sus obligaciones hasta el medio del Atlántico o hasta la Antártida.

               Por todo lo anterior y considerando los sobrecostos colosales que se ocasionarían, llegamos a la conclusión de que el Estado uruguayo necesita urgentemente equiparse con un barco multipropósito de última generación, con gran autonomía y características civiles pero también militares.

               Estos buques serán los buques almirantes de la flota uruguaya que deberán cumplir misiones civiles y militares.

               Frente a esta urgencia, la empresa DCNS realizó una oferta para proveer de tres buques al Estado uruguayo, en conformidad con los requerimientos de la Armada Nacional.

               Antes de entrar en los detalles de nuestra oferta, queremos enfatizar el hecho de que tenemos la capacidad de entregar un buque de manera casi inmediata. El buque que podemos proveer es el patrullero L´Adroit, que en la actualidad está en operaciones en la marina francesa.

               Como los señores Senadores pueden observar en la presentación, durante los últimos años L´Adroit fue involucrado en operaciones en varias partes del mundo y ha demostrado toda su confiabilidad en distintos teatros de operaciones, ya sean civiles o militares. A título de ejemplo, fue empleado para misiones humanitarias en el Líbano, para la protección de las plataformas petroleras en el Golfo de Guinea o en la intersección y el combate de piratas en el Canal de Mozambique.

               Si bien la versión existente incluye un sistema de armamento liviano –lo cual es suficiente para la realización de las misiones actuales de la marina francesa–, puede ser reconfigurado con armamento más pesado el día en que el Estado uruguayo quiera equiparse para enfrentar otro tipo de amenazas.

               Cabe mencionar que el buque ofrecido tiene poco uso y será entregado en perfectas condiciones. Contar a corto plazo con un buque, permite responder a las necesidades urgentes. Creemos que eso es más rentable para el Estado, aun considerando todos los sobrecostos ocasionados, que tener que esperar, por lo menos, dos años para que llegue un buque nuevo.

               Desde el año 2013 hemos identificado la necesidad de Uruguay y su interés por el buque L´Adroit. Cabe señalar que varios países están interesados en este patrullero con disponibilidad casi inmediata.

               No voy a entrar en detalles técnicos. Para mayor información les entregaremos carpetas que incluyen una presentación general de la empresa así como los puntos técnicos de nuestro buque.

               Recordamos que nuestro OPV cumple con el 100% de los requisitos establecidos por la marina uruguaya y aún más. Creemos interesante enfatizar los puntos que consideramos esenciales.

               Nuestro OPV 90 clase L’ Adroit tiene un alcance de 8.000 millas, que es superior a lo requerido por la Armada Nacional. Este alcance permite cumplir con las obligaciones de las Zopacas o mantener su presencia en la Antártida.

Además, tiene un hangar fijo para helicópteros, lo que permite proteger y realizar a bordo operaciones de mantenimiento.

               Este último punto es primordial. Un helicóptero equipado para misiones de búsqueda y rescate tiene un rango de acción máximo de 140 millas náuticas, o sea unas 290 millas ida y vuelta. Los helicópteros no pueden brindar apoyo desde la costa a las plataformas offshore ubicadas a 200 millas; tampoco pueden cubrir el territorio marítimo hasta las 350 millas.

El helicóptero tiene que actuar y despegar desde un barco con altos riesgos de corrosión y los golpes de las olas sobre el puente. Incluso, a raíz de la operación de mantenimiento requerido por cualquier helicóptero, estos no se pueden dejar sin hangar por mucho tiempo, o sea que necesitan protección permanentemente. Al no tener un hangar a bordo, la Armada no podrá cumplir con sus obligaciones. Insistimos en el hecho de que estos patrulleros serán los buques almirantes y multiuso de la Armada. Deberán ser lo más completos que sea posible, ya que no contarán con el apoyo de otros buques de tipo portahelicópteros o buques más grandes que puedan existir.

               Frente a la solicitud de la Armada en el mes de julio del presente año, DCNS hizo una oferta para tres buques construidos en Francia. Esta solicitud no incluía, a diferencia de la que había hecho antes el Ministerio de Defensa Nacional del Uruguay, la construcción local de un buque. Sin embargo, y como DCNS lo propuso al Estado uruguayo en el año 2014, reiteramos nuestra plena disposición en actualizar nuestra oferta e incluir la transferencia de tecnología tanto al astillero nacional –que llamamos el SCRA– como a la industria naval privada uruguaya, apuntando a la construcción total de un buque en Uruguay con nuestro apoyo y garantía.

               La transferencia de tecnología es algo complejo, que no se improvisa y que ya está prevista desde la concepción del barco. Con el objetivo, desde el inicio, de apuntar a un mercado internacional, el diseño del OPV L’Adroit se concibió en bloques para que su producción pueda exportarse hacia afuera de Francia. A la fecha –y como podrán verlo en esta última diapositiva– estamos orgullosos de poder decir que tenemos una amplia experiencia de proyectos basados en transferencia de tecnología en varios países del mundo, que crearon miles de empleos muy calificados. Hoy contamos con socios y bases industriales sólidas en varios países; por ejemplo, Brasil e India para los submarinos Scorpene; Arabia Saudita, donde construimos fragatas conjuntamente con ese país; Egipto y Malasia, donde hemos vendido corbetas Gowind, etcétera.

               Por el conocimiento que tenemos del mercado, sabemos que la mayoría de nuestros competidores no hacen una verdadera transferencia de producción, sino que limitan su transferencia a la capacitación para el mantenimiento o para realizar trabajos básicos en el país.

DCNS está plenamente consciente de que este proyecto, además de implicar grandes inversiones para el país, ofrece una oportunidad única para crear localmente numerosos empleos de fuerte valor agregado. A mediano plazo eso permitirá al país no solamente tener su independencia a la hora de operar y mantener su flota, sino también de disponer de toda la tecnología para armar su propia industria. Tenemos la capacidad y la voluntad de cumplir con el Decreto Nº 389/013, en el que se establece que se requiere el 20 % del monto del contrato en producción local. Hay que resaltar que el hecho de ofrecer transferencia de tecnología y construcción local no tendrá una incidencia que comprometa el proyecto en términos económicos.

               Para concluir mi presentación y si me lo permiten, quisiera volver a la relación que tiene el DCNS con el Estado francés porque es algo fundamental. Somos una empresa privada que tiene al Estado francés como su mayor accionista. Por un lado, al ser una empresa de carácter privado, estamos sometidos a las reglas del mercado: competitividad, rentabilidad, inversión sistemática, etcétera y, por otro, contamos con todo el apoyo del Estado francés.

               Además, la relación entre Francia y Uruguay, que siempre fue excelente, puede beneficiar este proyecto, además de brindar un acceso privilegiado a las tecnologías avanzadas tanto en el ámbito civil como militar.

Generalmente, los distintos equipos ofertados operan entre sí y son comprobados por nuestras fuerzas militares y autoridades civiles. Recordamos que en todas las ofertas realizadas ofrecimos una financiación, y estamos a disposición de las autoridades uruguayas para avanzar en sus condiciones, considerando que esta financiación podría beneficiarse del mecanismo de garantía del gobierno francés.

Agradezco nuevamente esta invitación para la presentación de nuestra empresa. Espero haber sido claro sobre lo que la empresa DCNS y el Estado francés pueden ofrecer a Uruguay a efectos de llevar a cabo este ambicioso proyecto.

Estamos a su disposición para contestar cualquier pregunta.

Muchas gracias.

SEÑOR PRESIDENTE.- Agradecemos su presencia y también el material que nos han dejado, que nos será de gran utilidad.

(Se retiran de sala los representantes de la empresa constructora naval francesa DCNS)









¨....que esta financiación podría beneficiarse .e del mecanismo de garantía del gobierno francés...¨
 
Los prestamos Alemanes tambien son garantizados por el gobierno Aleman.
"All warfare is based on deception. There is no place where espionage is not used. Offer the enemy bait to lure him."
 
(02-13-2016, 03:42 AM)el_francotirador escribió: Los prestamos Alemanes tambien son garantizados por el gobierno Aleman.

bueno entonces se da la ley del mercado la competencia es sabia


si seguimos así la final va a penales jeje

que queres que te diga habria que momprar 2 de c/u
 
http://www.diarioelpueblo.com.uy/titular...llero.htmlLa tripulación del buque recibió al embajador de Francia en Uruguay, Sylvain Itté; al intendente de Montevideo, Daniel Martínez; y a los subsecretarios uruguayos de Relaciones Exteriores, José Luis Cancela, y de Defensa, Jorge Menéndez.
 
Bueno, dos politicos.... algo es algo.
"All warfare is based on deception. There is no place where espionage is not used. Offer the enemy bait to lure him."
 
  


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